Cómo tratar los cólicos en bebés

Image Credit: Pixabay. Esta imagen ha sido modificada.

Los cólicos, caracterizados por periodos prolongados de llanto incesante, afectan al 40% de los bebés. Los médicos lo suelen considerar algo poco serio, pero no debería ser así, como explico en mi video Tratamiento de cólico del lactante cambiando la dieta de mama. Puede contribuir a la depresión posparto de la madre, interferir en la lactancia e incluso provocar la muerte del bebé en manos del padre o madre debido a un traumatismo craneal abusivo. No se están quejando por nada, los cólicos duelen

La profesión médica tiene un historial escandaloso, no solo por negar remedios para el dolor de los bebés, sino también por hacerles cirugía con poca o ninguna anestesia en los años 80. Hubo un famoso caso en el año 85, el pequeño Jeffrey Lawson, que tuvo que soportar una cirugía de corazón abierto completamente despierto y consciente. Se le dio un medicamento para paralizarlo, pero como si de una película de terror se tratase, el niño podía sentirlo todo. Tampoco se trataba de un cirujano de mala muerte; torturar de esta manera a los bebés era el estándar con las cirugías de los 80. Que no estamos hablando de 1880, no; esto era 1980.

“El enlace entre la AAP [American Academy of Pediatrics] y la Society of Anesthesiologists comentó que el uso de agentes paralizantes era una técnica estándar y honorada por el tiempo”… Esta profesión tiene un historial importante con negar la existencia del dolor de los bebés. No pensaban ni que fuese posible. Incluso hoy en día hay médicos que no usan analgésicos ni anestesia local para las circuncisiones. Es un proceso tan traumático que los bebés muestran respuestas más fuertes al dolor de las vacunas incluso meses después. 

Se cree que el dolor de los cólicos viene de problemas gastrointestinales, como los espasmos intestinales. En los videos Aceite de menta para el Síndrome del Intestino IrritableQué tomar antes de una colonoscopia, explico el papel del aceite de menta en la reducción de los espasmos intestinales. ¿Podría ayudar con los cólicos? Unas gotas de una solución de hoja de menta podrían disminuir a la mitad el número de episodios de cólicos y reducir los llantos diarios de 3 horas a 2. Es decir, puede funcionar igual de bien que la simeticona, el medicamento más usado para los cólicos. El problema es que se ha estudiado que la simeticona no tiene efectos positivos en los cólicos, por lo que decir que la menta es tan buena como algo que es inútil no es precisamente decir gran cosa. Además, la American Academy of Pediatrics nos advierte sobre el uso de aceite de menta en bebés.

Un estudio descubrió que había una preparación de infusión de hierbas que ayudaba, pero se ha advertido a los padres contra su uso, ya que podría interferir en la continuidad de la lactancia y tampoco existe una regulación clara por parte de la industria. Por ejemplo, el anís se usa a menudo para los cólicos. El anís chino se considera seguro y no tóxico, pero el japonés es venenoso. Son exactamente iguales, pero el japonés contiene una neurotoxina muy potente, y se sabe que ha contaminado al anís de los Estados Unidos. Así que no se lo deberíamos dar a los niños. 

Incluso se denunció dos veces la toxicidad de una dosis supuestamente homeopática de belladona, una solanácea letal, que está claro que no era lo suficientemente homeopática. Solo por ser homeopático no quiere decir que sea seguro. 

Tampoco es mejor porque te lo prescriba el médico. Los medicamentos para los cólicos también tienen belladona, y puede que funcionen pero no deberían usarse por sus peligrosos efectos secundarios. 

¿Qué hay de los eructos? Al final, “que el bebé eructe tras una comida es una recomendación típica para que pueda expulsar los gases que se acumulan durante la lactancia y puede ayudar a disminuir las molestias y los llantos”. no había mucha evidencia científica sobre esto hasta que se hico un estudio aleatorizado con grupo de control para la prevención de los cólicos y la regurgitación o “buches” en bebés sanos. ¿Qué se descubrió? Que los eructos son inútiles para esto e incluso hacen peor la regurgitación. ¡Los bebés que habían eructado lo hicieron el doble de veces que los que no!

Entonces, ¿qué tratamiento puede ser efectivo? Eliminar la proteína de la leche de vaca podría ser uno, ya que los cólicos parecen ser una especie de respuesta alérgica. Hace décadas que se mostró que los bebés que habían tomado leche de vaca desarrollaron respuestas de anticuerpos a las proteínas bovinas, lo que podría explicar por qué los cólicos mejoran al cambiar la leche de fórmula a una con proteína hipoalergénica hidrolizada o a base de soja. 

Los bebés amamantados y los que toman leche de fórmula tienen tasas similares de cólicos, pero podría ser porque la leche materna de las madres que beben leche de vaca podría tener esas proteínas. Sabemos que las proteínas de la leche de vaca pueden pasar a través de la leche materna y causar reacciones alérgicas. Según estudios sobre la leche de fórmula, se sabe que los cólicos eran síntomas comunes de la intolerancia a las proteínas de la leche de vaca en los años 70. Así que, con la idea de que las proteínas de la leche de vaca podrían traspasar al niño a través de la leche materna, se hizo un estudio donde las madres siguieron una dieta sin lácteos. De 19 bebés, el cólico desapareció en 13 de ellos, y pudieron mostrar como el cólico volvía en 12 de ellos al darles a sus madre un poco de lácteos. Por ejemplo, un niño desarrolló un cólico que se fue casi por completo en un día cuando su madre dejó de tomar leche de vaca, y le volvió cuando esta volvió a tomarla. Los investigadores concluyeron que el tratamiento de los cólicos infantiles en bebés amamantados es una dieta libre de leche de vaca para las madres; y esta recomendación continúa vigente hoy en día.


¿No es horripilante que al pobre Jeffrey le hiciesen cirugía de esa manera? Me he vuelto cada vez más cínico con el paso de los años, pero todavía me impacta lo equivocados que pueden estar los médicos a pesar de la existencia de evidencia y del sentido común. Ahora que hay más mujeres en medicina y que la mitad de los alumnos son mujeres, espero que las cosas cambien para mejor.

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Un saludo,

Michael Greger

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