La traducción de este texto viene de la mano de nuestra voluntaria Carmen Otero.
Solo 1 de cada 4 personas ha oído hablar de la infección por Campylobacter, comparado con el 90% que está familiarizado con la Salmonella. “Aunque la incidencia de estas dos infecciones gastrointestinales es asombrosamente alta”, afecta a más de un millón de estadounidenses cada año, “superando incluso la infección causada por el patógeno extraintestinal Escherichia coli (E.coli, con cepa ExPEC)”, un virus que aún menos personas conocen.
¿Extraintestinales? Eso significa fuera de los intestinos, lo cual causa infecciones de vejiga, y patógenos, es decir, enfermedades. De hecho, la E. coli provoca millones de infecciones al año. Tal y como analizo en mi video Friday Favorites: Infecciones del tracto urinario por consumo de pollo, “muchos indicios de evidencia indican que las aves de corral son un foco importante de infecciones del tracto urinario causado por animales destinados al consumo humano”, es decir, el medio de la bacteria para causar infecciones urinarias en personas. Esto se basa no solo en estudios que muestran que las infecciones en la sangre y en el tracto urinario en modelos de ratones las pueden provocar ciertos tipos de E. coli presente en la carne y los huevos de pollo comerciales, sino también en estudios de mujeres con infecciones del tracto urinario resistentes a múltiples fármacos que informaron sobre un consumo significativamente más frecuente de pollo. Del mismo modo, los consumidores de edad avanzada tenían significativamente más probabilidades de padecer infecciones de vejiga resistentes a Cipro (antibiótico) en comparación con los que no comían pollo. La carne de cerdo, pero no la de res, también se asoció con un mayor riesgo, como puedes ver a continuación en el minuto 1:14 de mi video.
“Apenas hay relación entre la carne de vacuno con la cepa ExPEC humana, lo que sugiere que el ganado vacuno no es un foco peligroso” (que provoque infecciones de vejiga), mientras que, en los pollos, hasta el 90 % de las carcasas de pollo que albergaban E. coli, aproximadamente 1 de cada 5 tests demostraron que son potencialmente peligrosos por causar esta enfermedad.
¿Qué pasa con los huevos? Sabemos que la carne de pollo en pequeñas piezas “está contaminada de ExPEC aislados que se asemejan a las cepas que causan infecciones en humanos”, pero ¿qué pasa con los huevos de gallina? En vez de 1 de cada 5 ExPEC era más como 1 de cada 20 entre los huevos, que se asemeja más a los niveles de la carne de cerdo o de res.
Los investigadores están tan seguros de que el pollo es el foco principal que cuando hallan el mismo tipo de cepa en un vegetariano, lo interpreta como “compatible con la transmisión entre personas o con errores en la notificación del consumo de aves de corral”, en lugar de “cepas humanas derivadas de una fuente diferente del pollo”. Alguien puede decir ser vegetariano y que en realidad coma algo de pollo, o… tal vez hubo transmisión entre humanos, o incluso de carrito de compra a humano. (Ve mi video Cómo comprar, manejar y guardar pollo). La mayoría de las personas no se desinfectan las manos tras tocar las aves en el supermercado, por lo que las “bacterias que quedan en el carrito podrían transmitirse a otros compradores. Un comprador que no consuma aves de corral o que sí consuma pero siga las precauciones de seguridad, aun así estaría expuesto a contaminantes de aves a través del carrito”.
“Es difícil estimar la cantidad de ExPEC que se intercambia por contacto entre personas” tras colonizar el recto de un consumidor. Los investigadores tomaron muestras de baños públicos para tratar de cuantificar el riesgo, recolectando más de mil muestras de 56 baños públicos en 33 establecimientos. A continuación, como puedes ver en el gráfico y en el minuto 3:07 de mi video, descubrieron mucha evidencia de E. coli en general, pero sobre todo en los baños de los parques públicos y en los lugares de comida rápida, incluso más que en las estaciones de servicio, lo cual me sorprendió. Sin embargo, lo que realmente me sorprendió fue que ¡las muestras de los baños de mujeres estaban más contaminadas que las de hombres!
Sin embargo, solo alrededor del 1% de las muestras que tomaron los investigadores dieron positivo en ExPEC, pero se tomaron de sitios que no eran inodoros y que a simple vista no estaban contaminados. Uno podría tener contacto con las bacterias ExPEC con las manos limpias tras cerrar un grifo al lavarse las manos, por ejemplo. De esta manera, el riesgo “no podría eliminarse por completo con un lavado de manos minucioso o evitando los restos con apariencia fecal”, aunque probablemente sea buena idea evitar eso de todos modos. El uso de desinfectantes para manos después de salir del baño y por supuesto en el pasillo de la carne tras tocar una bolsa de aves puede ofrecer una protección adicional.
¿Qué proporción de los 7 millones de infecciones de vejiga, una forma común de llamar a la infección del tracto urinario (ITU) lo causa la carne de pollo cada año en Estados Unidos? “Si no se consumiera más pollo, ¿cuántas infecciones urinarias por E. coli se evitarían y cuánto disminuiría la prevalencia?” Es difícil saberlo debido al “lapso de tiempo entre la adquisición y la colonización asintomática de un organismo ExPEC en el intestino y el desarrollo de una infección”. Puedes comer un poco de pollo contaminado hoy, pero la bacteria ExPEC que causa la ITU puede permanecer en tu colon durante meses antes de llegar a la vejiga y desencadenar una infección. La razón por la que sabemos que puede llevar tanto tiempo es por el estudio de la dinámica de la población intestinal de E. coli que causa las infecciones urinarias entre parejas. El aumento de las transferencias de recto a recto “podría explicar los niveles altos de E. coli presentes en la orina de una mujer infectada, lo que aumenta la probabilidad de transmisión por contacto directo”. Es decir, la E. coli podría transferirse a las parejas dependiendo de las prácticas íntimas, como el cunnilingus.
¿Conclusión? Existe “evidencia concluyente de que la carne y en particular las aves de corral son un foco importante para la exposición humana a la E. coli resistente a los antibióticos que está causando infecciones urinarias. Por tanto, se adoptó el término ITU o FUTI para describir estas infecciones transmitidas por los alimentos”.
En realidad podríamos reducir la carga de infecciones de vejiga que se transmiten con los alimentos mediante el desarrollo de algún tipo de vacuna de ExPEC. Pero ¿por qué no simplemente reducir el contacto con aves frescas o congeladas? No hay aves, no hay daño.
Hoy en día hay una especial preocupación por las infecciones resistentes a los antibióticos. Para obtener más información sobre la contaminación bacteriana, no te pierdas Friday Favorites: ¿Qué hay del pollo kosher y ecológico?.
¿Sería mejor comprar pollo orgánico? Ve mi video Supermicrobios dañinos en carne de pollo convencional en comparación con la ecológica.