La mejor forma de eliminar el cerumen de los oídos

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Antonio Galán voluntario activo en NutritionFacts.org.

Una de las causas reversibles más comunes de pérdida de audición es la acumulación de cerumen. La cera es normal y, si no está causando síntomas, hay que dejarla en paz. No comienza a interferir con la agudeza auditiva hasta que obstruye al menos el 80 % del canal auditivo. Irónicamente, los audífonos son un factor de riesgo para el exceso de cera en los oídos, igual que cualquier otra cosa que se meta en los oídos, como los tapones, ya que estimulan las glándulas de cerumen. O lo que es más irónico, también ocurre con los bastoncillos de punta de algodón que hasta 2/3 de la población usa para limpiarse los oídos. Quizás creas que estás mejorando su higiene al limpiar los oídos, cuando en realidad la estás empeorando. Al eliminar la cera protectora, los canales auditivos pueden quedar secos, con picazón y dolor, o incluso provocar “otalgia de bastoncillos”, un término acuñado para referirse a un síndrome de dolor de oído causado por esos hisopos de punta de algodón. No debería ser necesario limpiar los canales auditivos en absoluto, pues la cera debería salir por sí sola.

Así es. Las orejas se limpian solas. El revestimiento del canal auditivo crece hacia afuera desde el tímpano, por lo que la cera secretada y la suciedad que queda atrapada finalmente se transportan fuera de la oreja. Sin embargo, este mecanismo de autolimpieza puede fallar en 1 de cada 20 adultos jóvenes y en hasta 1 de cada 3 adultos ancianos y provocar una acumulación excesiva de cerumen o tapones, aunque es posible que ni siquiera lo sepan. 70 % de los encuestados con ambos oídos completamente bloqueados con cera pensaban que su audición era buena. Cuando se les aclararon los oídos, de repente pudieron oír mejor. Eliminar los tapones de cera también puede mejorar los síntomas de irritación, presión y congestión del oído. Entonces, ¿cuál es la mejor manera de limpiarse?

Prohibido usar bastoncillos. Empujar cualquier cosa en el canal auditivo puede agravarlo al compactar la cera aún más dentro del oído o traumatizar el canal, provocando abrasiones, infecciones o incluso, en raras ocasiones, perforación del tímpano. Hay incluso un informe de caso de un bastoncillo que causó absceso cerebral y meningitis letal, aunque la presencia de astillas de madera sugiere que la punta se rompió dentro de la oreja. Los paquetes de bastoncillos advierten a los usuarios contra su inserción en el canal auditivo, pero tal vez las etiquetas de advertencia deberían ser aún más claras, como escribió un médico clínico: “manténgase alejado del oído”.

¿Y las gotas para los oídos que venden para eliminar la cera? Hay en el mercado alrededor de una docena de formulaciones diferentes, ninguna de las cuales parece funcionar mejor que otra, ni siquiera en comparación con la solución salina (simple agua salada) o el agua corriente. Cinco días de tratamiento eliminan la cera del oído en aproximadamente 1 de cada 5 casos, en comparación con solo 1 de cada 20 que desaparecen por sí solos dentro de ese tiempo. Como mínimo, esas gotas para los oídos pueden ablandar la cera antes de irrigarla con una pera.

La irrigación ótica (también llamada lavado de oídos) consiste en enjuagar la cera con un chorro de agua tibia (a temperatura corporal) a baja presión. Funciona un 70-90 % de las veces y, si no lo consigue, los médicos tienen dispositivos sofisticados para eliminar manualmente la cera bajo observación directa. Aunque también puedes probar la irrigación en casa. Las personas asignadas al azar para usar una pera en casa tuvieron una tasa de éxito de alrededor del 50 % al eliminar su obstrucción. Armados con este conocimiento, era significativamente menos probable que más adelante lo pidieran en consulta. Las complicaciones significativas solo ocurren en aproximadamente 1 de cada 1000 irrigaciones.

Tampoco se te ocurra usar irrigadores dentales. Hay artículos con títulos como “Lesión otológica catastrófica por irrigación oral a chorro del canal auditivo externo”. Incluso a un tercio de su potencia, estos irrigadores fueron capaces de perforar los tímpanos de cadáveres recientes. Si aun así insistes en desoír este consejo, al menos pon el ajuste más bajo, usa el dispensador con más orificios y asegúrate de que el chorro se dirija solo contra las paredes del canal auditivo y nunca hacia el tímpano. Pero, de verdad, no lo hagas.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

• Schwartz SR, Magit AE, Rosenfeld RM, et al. Clinical Practice Guideline (Update): Earwax (Cerumen Impaction). Otolaryngol Head Neck Surg. 2017;156(1_suppl):S1-S29.
• Nagala S, Singh P, Tostevin P. Extent of cotton-bud use in ears. Br J Gen Pract. 2011;61(592):662-663.
• Baxter P. Association between use of cotton tipped swabs and cerumen plugs. Br Med J (Clin Res Ed). 1983;287(6401):1260.
• Barton RT. Q-tip otalgia. JAMA. 1972;220(12):1619.
• Lewis-Cullinan C, Janken JK. Effect of cerumen removal on the hearing ability of geriatric patients. J Adv Nurs. 1990;15(5):594-600.
• Oron Y, Zwecker-Lazar I, Levy D, Kreitler S, Roth Y. Cerumen removal: comparison of cerumenolytic agents and effect on cognition among the elderly. Arch Gerontol Geriatr. 2011;52(2):228-232.
• Nussinovitch M, Rimon A, Volovitz B, Raveh E, Prais D, Amir J. Cotton-tip applicators as a leading cause of otitis externa. Int J Pediatr Otorhinolaryngol. 2004;68(4):433-435.
• Goldman SA, Ankerstjerne JK, Welker KB, Chen DA. Fatal meningitis and brain abscess resulting from foreign body-induced otomastoiditis. Otolaryngol Head Neck Surg. 1998;118(1):6-8.
• Aaron K, Cooper TE, Warner L, Burton MJ. Ear drops for the removal of ear wax. Cochrane Database Syst Rev. 2018;7(7):CD012171.
• Keane EM, Wilson H, McGrane D, Coakley D, Walsh JB. Use of solvents to disperse ear wax. Br J Clin Pract. 1995;49(2):71-72.
• Coppin R, Wicke D, Little P. Managing earwax in primary care: efficacy of self-treatment using a bulb syringe. Br J Gen Pract. 2008;58(546):44-49.
• Coppin R, Wicke D, Little P. Randomized trial of bulb syringes for earwax: impact on health service utilization. Ann Fam Med. 2011;9(2):110-114.
• Nieman CL, Oh ES. Hearing loss. Ann Intern Med. 2020;173(11):ITC81-ITC96.
• Dinsdale RC, Roland PS, Manning SC, Meyerhoff WL. Catastrophic otologic injury from oral jet irrigation of the external auditory canal. Laryngoscope. 1991;101(1 Pt 1):75-78.

Gráficos de Avo Media

• audición
• salud del oído