La traducción de este texto viene de la mano de nuestra voluntaria Carmen Otero Romero.
La “Robin Hood de la ciencia” sigue ofreciendo más de 60 millones de artículos científicos de forma gratuita a cualquier persona del mundo en https://sci-hub.se
Las primeras ediciones de las primeras revistas científicas se publicaron en 1665, incluidas la “observación de un punto en uno de los cinturones del planeta Júpiter realizada en Inglaterra”, la invención de los nuevos telescopios de un tal Sr. Newton, y el hallazgo de su amigo llamado Halley, que describió un cometa. La misma revista que informaba sobre si las naranjas y los limones podían curar el escorbuto y sobre si la corteza de los sauces podía bajar la fiebre, también publicó una carta de alguien de las Colonias sobre lo que pasa si juegas con cometas durante las tormentas eléctricas, e incluía un relato de un notable músico de 8 años llamado Amadeus. En este último siglo, la revista publicó algunos bocetos de la estructura de una molécula llamada ADN. Puedes ver el contenido actual de esta revista que data de hace cientos de años al comienzo de mi video Cómo acceder gratis a artículos de investigación. Tras 350 años y aún publicando, la revista está disponible tanto online como en formato impreso por el módico precio de 6666 dólares la suscripción anual.
Como puedes imaginar, debido al precio tan elevado de las revistas, “los médicos y otros profesionales de la salud en países en desarrollo no están al tanto de la información relevante sobre la salud”. En la década de 1990, “había cierto optimismo en creer que para 2004 todos o casi todos los profesionales de la salud en los países en desarrollo tendrían acceso” a dicha información. Pero el 2004 llegó y pasó, por lo que se fijó para el 2015. “La falta de acceso a la información sigue siendo un obstáculo importante para la atención sanitaria basada en el conocimiento en los países en desarrollo”, pero seguramente para el 2015 podríamos “lograr información sanitaria para todos”, ¿no? “Siendo realistas, solo los científicos de grandes universidades bien financiadas en países desarrollados tienen acceso completo a dicha investigación”, aunque sucede cada vez menos con la subida de precios. Existe un problema cuando, hasta Harvard, con 30 mil millones de dólares, afirma que los costes de las revistas de investigación “ahora son prohibitivos”.
Mientras tanto, los editores de revistas están recaudando miles de millones de dólares, cobrando a las instituciones hasta 35,000 dólares anuales por revista y cobrando a las personas por cada artículo online. Imagina que a un miembro de tu familia le diagnostican una enfermedad y te conectas online. Puedes leer sobre muchas cosas en Internet, pero si quieres ciencia actualizada puede llegar a ser caro: “10, 15, 20, incluso 30 dólares por una sola ojeada a un artículo”. Y no sólo estás pagando por leer la investigación; probablemente también pagues por la investigación. ¿Financian la investigación con el dinero de tus impuestos pero luego no puedes acceder a dicha investigación por la que pagaste? “Si no estuviera tan normalizado, el modelo tradicional de publicación académica se consideraría escandaloso”.
“Imagínate que tu gobierno local construye un bonito parque verde, pero cuando vas a hacer un picnic una empresa privada exige cobrarte una entrada. Así es más o menos cómo funciona la investigación científica… El sistema periodístico que convierte los dólares de la investigación pública en ganancias de la publicación privada ha sido durante mucho tiempo una fuente de descontento…”. Los publicistas acaban no pagando nada por la investigación. Lo obtienen gratis. No pagan nada a los investigadores. “Así que pagamos por él y luego tenemos que volver a pagar si queremos leerlo”. De esta forma acabar siendo ciencia con ánimo de lucro en lugar de ciencia con conocimiento.
Te presento a Alexandra Elbakyan, apodada por algunos como “la Robin Hood de la ciencia”. Es una “historia de cómo una investigadora hizo que casi todos los artículos científicos publicados estuviesen disponibles de forma gratuita para cualquier persona, en cualquier parte del mundo”.
Señalada por Nature, la revista científica más prestigiosa del mundo, como una de las 10 personas más importantes en la ciencia en 2016, Elbakyan era una estudiante de posgrado en Kazajstán, “frustrada por no poder leer algunos artículos académicos” porque no podía permitírselo. Así que aprendió a eludir los pagos de los editores”. Luego Elbakyan comenzó Sci-Hub, una página web que al principio era sci-hub.io pero ahora en sci-hub.tw “para así eliminar todas las barreras en el camino de la ciencia”, regalando literatura científica, médica y de nutrición de todo el mundo de forma gratuita. .
“Lo que hizo es nada más y nada menos que impresionante”, dijo un investigador. “La falta de acceso a la literatura científica es una gran injusticia y ella lo arregló de una sola vez”.
Desde que grabé la narración para mi video, el sitio web original sci-hub.io se cerró, pero actualmente se puede acceder a él en https://sci-hub.se/ y otros 5 dominios en caso de que también los eliminen. Siempre puedes ver la lista actualizada de enlaces activos en la página de Wikipedia de Sci-Hub. Los enlaces se proporcionan solo con fines educativos, ¡literalmente!
Sin embargo, ¿no es ilegal descargar documentos “pirateados”? Exploro esta controversia en la próxima entrega de esta serie de dos partes, Sci-Hub nos proporciona un sinfín de conocimiento.
Mi investigación sobre Sci-Hub provino de un seminario web completo que hice sobre técnicas de investigación, que se tradujo en un curso de educación médica continua online a través del American College of Lifestyle Medicine. Puedes comprobarlo en How to Be an Evidence-Based Lifestyle Medicine Practitioner. Espero disponer pronto de una serie completa de cursos, así que ¡estad atentos!
¿Qué hemos aprendido?
- Hace 350 años del primer número de una de las primeras revistas científicas que hoy en día sigue publicando y que se encuentra disponible tanto en formato online como impreso, con un coste de 6666 dólares al año.
- Debido al precio tan alto de las revistas, se les niega el acceso de información relevante a profesionales de la salud en países en desarrollo, información que podría salvar vidas y que a medida que los costes aumentan, hay incluso universidades prestigiosas y bien financiadas de todo el mundo occidental que no se lo pueden permitir.
- Los editores de revistas ganan miles de millones de dólares al año, cobrando a las personas por artículo y a las instituciones hasta 35.000 dólares al año.
- Los estudios a menudo se financian con dinero de los impuestos, pero el modelo tradicional de publicación académica impide que los contribuyentes tengan acceso a la investigación.
- Apodada la “Robin Hood de la ciencia”, Alexandra Elbakyan puso a disposición de todos sin coste ninguno casi todos los artículos científicos publicados.
- Como estudiante de posgrado en Kazajstán, la Sra. Elbakyan creció frustrada por no poder leer muchos de estos artículos debido a su precio, por lo que aprendió a eludir los pagos y compartió la literatura científica, médica y de nutrición del mundo de forma gratuita a través de su página web Sci- Centro.
- Mi seminario web sobre técnicas de investigación está disponible, en formato online, como un curso de educación médica continua a través del Colegio Estadounidense de Medicina del Estilo de Vida. Consulta Cómo ser un profesional de la medicina del estilo de vida.
Un saludo,
Michael Greger
- 2012: Arrancar de raíz las principales causas de muerte
- 2013: Más de una manzana al día para prevenir nuestras enfermedades más comunes
- 2014: De la mesa a estar capacitado: combatir enfermedades discapacitantes con los alimentos
- 2015: Alimentos como medicina: prevención y tratamiento de las enfermedades más temidas con alimentación
- 2016: Comer para no morir: el rol de la alimentación en prevenir, detener y revertir nuestros 15 principales asesinos
- 2019: Ponencia sobre pérdida de peso basada en evidencia