¿Los suplementos de vitamina B12 causan acné, fracturas de huesos y cáncer de pulmón?

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Una de cada diez personas que recibe inyecciones de vitamina B12 puede desarrollar acné. ¿Qué es lo que muestran los ensayos controlados aleatorizados acerca de la suplementación diaria de vitamina B12 en dosis altas en relación con el cáncer, la muerte y la longevidad?

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Irene Otero voluntaria activa en NutritionFacts.org.

La suplementación con vitamina B12 es crucial para todos aquellos con una alimentación basada en plantas, pero ¿tiene efectos secundarios? Quédate, para descubrirlo.

“El acné es una enfermedad que solo afecta a los humanos”. ¿Por qué? Bueno, piensa en la distribución de las grasientas glándulas sebáceas (cara, pecho y espalda), que son precisamente las estructuras que generan más obstrucción durante el parto. Así que quizás “la lubricación extra de estas partes pueda hacer que el bebé sea más resbaladizo durante el parto, dándonos una ventaja selectiva para un nacimiento exitoso”. Bien, ¿pero qué causa que se inflamen y se conviertan en espinillas más adelante?

Mientras que en las sociedades occidentales el acné es una enfermedad de la piel casi universal, que afecta hasta al 95 % de adolescentes, en otras poblaciones que siguen dietas más tradicionales no hay ningún caso. Esto indica que quizás “el asesoramiento nutricional debería ser la primera terapia para los individuos con acné de ligero a moderado”. Parece que son los alimentos con un alto índice glucémico y los productos lácteos; hablamos de azúcar, refrescos, hidratos procesados, harina blanca, cereales de desayuno y productos lácteos como leche, queso, yogur o suero de leche, así como grasas saturadas y trans concentradas en carne, lácteos, procesados y comida rápida.

Entonces, por ejemplo, “se debería animar a los pacientes con acné a dejar de tomar suplementos de proteína de suero de leche”. “La relación entre leche y gravedad del acné se puede explicar por la presencia en los lácteos de hormonas esteroides sexuales reproductivas normales o la mayor producción de hormonas del crecimiento como la IGF-1”. Y si estás pensando “espera, dejé los lácteos hace un mes y no veo cambios”, debería tenerse en cuenta que los cambios en el acné debidos a cambios en la dieta se esperan después de al menos 10 o 12 semanas; así que tienes que ser constante.

No es una sorpresa que “los pacientes con acné tuviesen dos veces más probabilidades de no ser veganos, comparados con el grupo de control”, pero la diferencia no fue estadísticamente significativa. Entonces, ¿puede ser que los veganos comiesen mucha comida basura vegana? Consideremos lo siguiente: “¿Acné inducido por la vitamina B12?” Nuestros parientes los grandes primates herbívoros, como los gorilas, adquieren toda la B12 que necesitan comiendo heces, pero yo prefiero los suplementos. No tienes que preocuparte de tomar demasiado “porque no hay datos de efectos adversos asociados con un exceso de consumo de B12”, pero esto no es cierto. Se describió por primera vez en los años 50, alrededor de 1 de cada 10 personas sufrió una erupción de acné días o incluso horas después de haber recibido una inyección de vitamina B12, que luego desaparecía rápidamente al dejar de inyectarse.

En aquella época, no teníamos ni idea de qué mecanismo podría ser, el problema se quedó sin resolver hasta hace pocos años, cuando por fin lo desciframos: la vitamina B12 modula la expresión del gen de las bacterias de la piel que causan acné. Tomaron muestras de la piel de 10 personas antes y después de inyectarles vitamina B12. Resulta que el nivel de vitamina B12 en la piel es proporcional al nivel en sangre; por lo que, tras una inyección las bacterias de la piel tienen que fabricar menos B12. Por eso, las bacterias del acné se pueden concentrar en usar sus células para producir más compuestos que atacan tu cara. Sin el exceso de B12 en la piel, que se muestra aquí en verde, las bacterias tienen que fabricar la mayor parte ellas mismas, en vez de porfirinas que causan la inflamación del acné. Cuando hay mucha B12, las bacterias no pueden malgastar recursos y se concentran en llenarte de espinillas. 

Bueno, entonces, ¿qué hacer? Aquellos con una alimentación a base de plantas tienen que tomar suplementos de B12. Sí, pero no tienen que inyectarse. El acné por vitamina B12 tiende a aparecer solo con dosis por encima de los 5 000 a 10 000 microgramos por semana, muy por encima de 50 microgramos al día como yo recomiendo, o si no 2 000 microgramos una vez por semana. Una dosis de 5 000 a 10 000 por semana se da solo para tratar deficiencia de B12. Si recuerdas mi video anterior, la deficiencia de B12 se trata con 1 000 microgramos al día durante un mes o más, lo que podría desencadenar acné, como le pasó a esta mujer vegana que no tomaba B12, desarrolló deficiencia de B12 y tuvo que tratarse con dosis tan altas que su cara se llenó de acné. Así que lo mejor es no llegar a la deficiencia de B12. Pero, mira, si nos ponemos en lo peor, incluso con inyecciones de B12, las probabilidades de que causen acné son 1 de 10.

En 2019, el Estudio de salud de las enfermeras de Harvard encontró una “conexión entre dosis altas de vitaminas B6 y B12 (en alimentos fortificados y suplementos dietéticos), y las fracturas de cadera en mujeres posmenopáusicas”. Hay que recalcar que fue debido a la combinación de vitaminas B6 y B12. Sabemos que, por sí mismo, un tratamiento con altas dosis de vitamina B6 podría aumentar el riesgo de fractura de cadera. De hecho, este aumentó un 40 % en quienes estuvieron tomando dosis altas de suplementos de B6 durante cerca de una década, pero no en quienes tomaron B12.

El estudio de Harvard llegó a la misma conclusión: la ingesta alta de vitamina B12 por sí sola no se asocia a un mayor riesgo. De hecho, algunos estudios observacionales incluso sugieren un riesgo de fractura ligeramente menor con niveles altos de B12 en sangre. Pero los estudios que proporcionan la evidencia más sólida son los de intervención, en los que asignan a los sujetos al azar al grupo con B12 para que podamos ver exactamente qué es lo que sucede. Aun así, no se observó un aumento del riesgo de fractura entre los que tomaron B12. En conclusión, según los ensayos controlados aleatorizados, no se ha demostrado que las dosis altas de vitamina B12 estén asociadas con el riesgo de fracturas.

Bueno ¿y qué pasa con esto? En 2017, un estudio encontró que los hombres que tomaban suplementos de vitamina B12 parecían tener un mayor riesgo de cáncer de pulmón. Eso sí, fue mayormente entre hombres fumadores y no encontraron tal asociación en las mujeres. ¿Podría ser que tomando B12 estuviésemos alimentando algunos tumores en ciernes? Sinceramente, es difícil imaginar que una vitamina sea cancerígena por sí sola, sobre todo si, además, afecta a los hombres pero no a las mujeres. Lo que está claro es que necesitamos estudios adicionales. Pero lo cierto es que, cuando se compararon todos los estudios observacionales, no hubo una correlación significativa entre los niveles de B12 en la sangre y el cáncer de pulmón, fuesen fumadores o no. En todo caso, la mayoría de los estudios tendían a considerar niveles más altos de B12 como protectores.

Pero luego, en 2018, un nuevo estudio encontró una conexión entre el riesgo de padecer cáncer de pulmón y niveles elevados de B12 en sangre, que nuevamente parece ser más una cosa de fumadores. Hay que decir que fue otro estudio observacional en el que se vio que aquellos con niveles más altos de B12 también tenían más probabilidades de padecer cáncer en el futuro. Pero quienes me conocen ya saben lo que pienso. Los estudios observacionales tienen dos grandes inconvenientes que hacen imposible atribuir causa y efecto: los factores de confusión y la causalidad inversa.

¿Cuál podría ser el factor de confusión en este caso, un tercer factor que relacione tanto los niveles de B12 como de cáncer y que pueda ser la verdadera causa? Bueno, ¿quién tiene los niveles más altos de B12 en sangre? Aquellos que consumen mucha carne y lácteos, que son, probablemente, los principales contribuyentes a la enfermedad. Aquellos que comen más carne tienen más posibilidades de padecer cáncer de pulmón, y estas aumentan cerca de un 35 % por cada hamburguesa de un cuarto de libra al día y un 20 % por cada salchicha de desayuno. Por lo tanto, no es de extrañar que aquellos con niveles más altos de B12 en sangre puedan tener más cáncer de pulmón. La B12 podría ser simplemente un marcador de la ingesta de carne.

Y, si lo recuerdan, la causalidad inversa es cuando en lugar de X que conduce a Y, tal vez es Y la que conduce a X. Entonces, en lugar de niveles altos de B12 en sangre que conducen a cáncer, tal vez es el cáncer el que provoca niveles altos de B12 en sangre. De hecho, casi las tres cuartas partes de los pacientes con cáncer presentan niveles elevados de B12. Por lo tanto, estos podrían ser solo un biomarcador de cáncer. Hay muchísimos factores, además de la ingesta de vitamina B12, que pueden elevar los niveles de cáncer: problemas hepáticos, problemas renales, problemas de la médula ósea y cáncer. Por lo tanto, podrían ser sólo un biomarcador de un cáncer que aún no ha sido diagnosticado.

Bueno, pero ¿qué pasa con los estudios observacionales que vinculan específicamente la ingesta de suplementos con el cáncer de pulmón? Eso también podría ser una causalidad inversa, en la que alguien con riesgo de padecer cáncer (en otras palabras, un fumador) trataría de tomar vitaminas para disminuir el riesgo. Básicamente, cualquier factor relacionado con el tabaquismo podría estar indirectamente relacionado con el cáncer de pulmón, aunque obviamente es el responsable principal. Entonces, nos quedamos con el dilema de la causalidad del huevo o la gallina, que es exactamente el motivo por el cual necesitamos ensayos controlados aleatorizados para ver si existe alguna causa y efecto. La situación se volvió aún más urgente después de que estudios genéticos sugiriesen que el riesgo aumentaría en quienes nacen con predisposición a tener niveles altos de B12. Afortunadamente, sí que tenemos ensayos controlados aleatorizados al respecto (más de una docena, de hecho) en los que miles de personas tomaron hasta 2000 microgramos de B12 todos los días durante años. Y muestran que la suplementación con vitamina B no tiene ningún efecto en cuanto a contraer cáncer, morir de cáncer, específicamente cáncer de pulmón, o morir en general. De hecho, en todo caso, los suplementos de vitamina B podrían reducir el riesgo de padecer el cáncer de piel más peligroso.

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Producción de video de Glass Entertainment

Gráficos de Avocado Video

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Irene Otero voluntaria activa en NutritionFacts.org.

La suplementación con vitamina B12 es crucial para todos aquellos con una alimentación basada en plantas, pero ¿tiene efectos secundarios? Quédate, para descubrirlo.

“El acné es una enfermedad que solo afecta a los humanos”. ¿Por qué? Bueno, piensa en la distribución de las grasientas glándulas sebáceas (cara, pecho y espalda), que son precisamente las estructuras que generan más obstrucción durante el parto. Así que quizás “la lubricación extra de estas partes pueda hacer que el bebé sea más resbaladizo durante el parto, dándonos una ventaja selectiva para un nacimiento exitoso”. Bien, ¿pero qué causa que se inflamen y se conviertan en espinillas más adelante?

Mientras que en las sociedades occidentales el acné es una enfermedad de la piel casi universal, que afecta hasta al 95 % de adolescentes, en otras poblaciones que siguen dietas más tradicionales no hay ningún caso. Esto indica que quizás “el asesoramiento nutricional debería ser la primera terapia para los individuos con acné de ligero a moderado”. Parece que son los alimentos con un alto índice glucémico y los productos lácteos; hablamos de azúcar, refrescos, hidratos procesados, harina blanca, cereales de desayuno y productos lácteos como leche, queso, yogur o suero de leche, así como grasas saturadas y trans concentradas en carne, lácteos, procesados y comida rápida.

Entonces, por ejemplo, “se debería animar a los pacientes con acné a dejar de tomar suplementos de proteína de suero de leche”. “La relación entre leche y gravedad del acné se puede explicar por la presencia en los lácteos de hormonas esteroides sexuales reproductivas normales o la mayor producción de hormonas del crecimiento como la IGF-1”. Y si estás pensando “espera, dejé los lácteos hace un mes y no veo cambios”, debería tenerse en cuenta que los cambios en el acné debidos a cambios en la dieta se esperan después de al menos 10 o 12 semanas; así que tienes que ser constante.

No es una sorpresa que “los pacientes con acné tuviesen dos veces más probabilidades de no ser veganos, comparados con el grupo de control”, pero la diferencia no fue estadísticamente significativa. Entonces, ¿puede ser que los veganos comiesen mucha comida basura vegana? Consideremos lo siguiente: “¿Acné inducido por la vitamina B12?” Nuestros parientes los grandes primates herbívoros, como los gorilas, adquieren toda la B12 que necesitan comiendo heces, pero yo prefiero los suplementos. No tienes que preocuparte de tomar demasiado “porque no hay datos de efectos adversos asociados con un exceso de consumo de B12”, pero esto no es cierto. Se describió por primera vez en los años 50, alrededor de 1 de cada 10 personas sufrió una erupción de acné días o incluso horas después de haber recibido una inyección de vitamina B12, que luego desaparecía rápidamente al dejar de inyectarse.

En aquella época, no teníamos ni idea de qué mecanismo podría ser, el problema se quedó sin resolver hasta hace pocos años, cuando por fin lo desciframos: la vitamina B12 modula la expresión del gen de las bacterias de la piel que causan acné. Tomaron muestras de la piel de 10 personas antes y después de inyectarles vitamina B12. Resulta que el nivel de vitamina B12 en la piel es proporcional al nivel en sangre; por lo que, tras una inyección las bacterias de la piel tienen que fabricar menos B12. Por eso, las bacterias del acné se pueden concentrar en usar sus células para producir más compuestos que atacan tu cara. Sin el exceso de B12 en la piel, que se muestra aquí en verde, las bacterias tienen que fabricar la mayor parte ellas mismas, en vez de porfirinas que causan la inflamación del acné. Cuando hay mucha B12, las bacterias no pueden malgastar recursos y se concentran en llenarte de espinillas. 

Bueno, entonces, ¿qué hacer? Aquellos con una alimentación a base de plantas tienen que tomar suplementos de B12. Sí, pero no tienen que inyectarse. El acné por vitamina B12 tiende a aparecer solo con dosis por encima de los 5 000 a 10 000 microgramos por semana, muy por encima de 50 microgramos al día como yo recomiendo, o si no 2 000 microgramos una vez por semana. Una dosis de 5 000 a 10 000 por semana se da solo para tratar deficiencia de B12. Si recuerdas mi video anterior, la deficiencia de B12 se trata con 1 000 microgramos al día durante un mes o más, lo que podría desencadenar acné, como le pasó a esta mujer vegana que no tomaba B12, desarrolló deficiencia de B12 y tuvo que tratarse con dosis tan altas que su cara se llenó de acné. Así que lo mejor es no llegar a la deficiencia de B12. Pero, mira, si nos ponemos en lo peor, incluso con inyecciones de B12, las probabilidades de que causen acné son 1 de 10.

En 2019, el Estudio de salud de las enfermeras de Harvard encontró una “conexión entre dosis altas de vitaminas B6 y B12 (en alimentos fortificados y suplementos dietéticos), y las fracturas de cadera en mujeres posmenopáusicas”. Hay que recalcar que fue debido a la combinación de vitaminas B6 y B12. Sabemos que, por sí mismo, un tratamiento con altas dosis de vitamina B6 podría aumentar el riesgo de fractura de cadera. De hecho, este aumentó un 40 % en quienes estuvieron tomando dosis altas de suplementos de B6 durante cerca de una década, pero no en quienes tomaron B12.

El estudio de Harvard llegó a la misma conclusión: la ingesta alta de vitamina B12 por sí sola no se asocia a un mayor riesgo. De hecho, algunos estudios observacionales incluso sugieren un riesgo de fractura ligeramente menor con niveles altos de B12 en sangre. Pero los estudios que proporcionan la evidencia más sólida son los de intervención, en los que asignan a los sujetos al azar al grupo con B12 para que podamos ver exactamente qué es lo que sucede. Aun así, no se observó un aumento del riesgo de fractura entre los que tomaron B12. En conclusión, según los ensayos controlados aleatorizados, no se ha demostrado que las dosis altas de vitamina B12 estén asociadas con el riesgo de fracturas.

Bueno ¿y qué pasa con esto? En 2017, un estudio encontró que los hombres que tomaban suplementos de vitamina B12 parecían tener un mayor riesgo de cáncer de pulmón. Eso sí, fue mayormente entre hombres fumadores y no encontraron tal asociación en las mujeres. ¿Podría ser que tomando B12 estuviésemos alimentando algunos tumores en ciernes? Sinceramente, es difícil imaginar que una vitamina sea cancerígena por sí sola, sobre todo si, además, afecta a los hombres pero no a las mujeres. Lo que está claro es que necesitamos estudios adicionales. Pero lo cierto es que, cuando se compararon todos los estudios observacionales, no hubo una correlación significativa entre los niveles de B12 en la sangre y el cáncer de pulmón, fuesen fumadores o no. En todo caso, la mayoría de los estudios tendían a considerar niveles más altos de B12 como protectores.

Pero luego, en 2018, un nuevo estudio encontró una conexión entre el riesgo de padecer cáncer de pulmón y niveles elevados de B12 en sangre, que nuevamente parece ser más una cosa de fumadores. Hay que decir que fue otro estudio observacional en el que se vio que aquellos con niveles más altos de B12 también tenían más probabilidades de padecer cáncer en el futuro. Pero quienes me conocen ya saben lo que pienso. Los estudios observacionales tienen dos grandes inconvenientes que hacen imposible atribuir causa y efecto: los factores de confusión y la causalidad inversa.

¿Cuál podría ser el factor de confusión en este caso, un tercer factor que relacione tanto los niveles de B12 como de cáncer y que pueda ser la verdadera causa? Bueno, ¿quién tiene los niveles más altos de B12 en sangre? Aquellos que consumen mucha carne y lácteos, que son, probablemente, los principales contribuyentes a la enfermedad. Aquellos que comen más carne tienen más posibilidades de padecer cáncer de pulmón, y estas aumentan cerca de un 35 % por cada hamburguesa de un cuarto de libra al día y un 20 % por cada salchicha de desayuno. Por lo tanto, no es de extrañar que aquellos con niveles más altos de B12 en sangre puedan tener más cáncer de pulmón. La B12 podría ser simplemente un marcador de la ingesta de carne.

Y, si lo recuerdan, la causalidad inversa es cuando en lugar de X que conduce a Y, tal vez es Y la que conduce a X. Entonces, en lugar de niveles altos de B12 en sangre que conducen a cáncer, tal vez es el cáncer el que provoca niveles altos de B12 en sangre. De hecho, casi las tres cuartas partes de los pacientes con cáncer presentan niveles elevados de B12. Por lo tanto, estos podrían ser solo un biomarcador de cáncer. Hay muchísimos factores, además de la ingesta de vitamina B12, que pueden elevar los niveles de cáncer: problemas hepáticos, problemas renales, problemas de la médula ósea y cáncer. Por lo tanto, podrían ser sólo un biomarcador de un cáncer que aún no ha sido diagnosticado.

Bueno, pero ¿qué pasa con los estudios observacionales que vinculan específicamente la ingesta de suplementos con el cáncer de pulmón? Eso también podría ser una causalidad inversa, en la que alguien con riesgo de padecer cáncer (en otras palabras, un fumador) trataría de tomar vitaminas para disminuir el riesgo. Básicamente, cualquier factor relacionado con el tabaquismo podría estar indirectamente relacionado con el cáncer de pulmón, aunque obviamente es el responsable principal. Entonces, nos quedamos con el dilema de la causalidad del huevo o la gallina, que es exactamente el motivo por el cual necesitamos ensayos controlados aleatorizados para ver si existe alguna causa y efecto. La situación se volvió aún más urgente después de que estudios genéticos sugiriesen que el riesgo aumentaría en quienes nacen con predisposición a tener niveles altos de B12. Afortunadamente, sí que tenemos ensayos controlados aleatorizados al respecto (más de una docena, de hecho) en los que miles de personas tomaron hasta 2000 microgramos de B12 todos los días durante años. Y muestran que la suplementación con vitamina B no tiene ningún efecto en cuanto a contraer cáncer, morir de cáncer, específicamente cáncer de pulmón, o morir en general. De hecho, en todo caso, los suplementos de vitamina B podrían reducir el riesgo de padecer el cáncer de piel más peligroso.

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Nota del Doctor

Este video forma parte de mi examen extensivo de la B12. Para conocer el contexto y mis recomendaciones actualizadas, mira:

También exploré el papel de la vitamina B12 en el riesgo de apoplejía. Mira: 

El video fue publicado originalmente el 30 de noviembre y 2 de diciembre de 2020.

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