La traducción de este texto viene de la mano de nuestra voluntaria Victoria Rodríguez.
¿Cuántas partículas de plástico por porción se han encontrado en el pescado?
La contaminación de nuestras vías navegables por microplásticos no solo representa una amenaza para los ecosistemas marinos, sino también para la salud humana. Es evidente que nos exponemos a estos contaminantes cuando consumimos pescados y mariscos, y esto puede representar un riesgo respecto de la inocuidad de los alimentos. Pero ¿hay algunos mariscos y pescados menos contaminados que otros? En el primer estudio publicado se analizaron los moluscos. Al ingerir una porción promedio de mejillones, se consumen aproximadamente 90 partículas de plástico, mientras que una porción promedio de ostras puede contener solo alrededor de 50. “En consecuencia, la exposición anual alimentaria para los consumidores europeos de mariscos puede ascender a 11,000 microplásticos ingeridos por año”, aunque no sabemos qué tipo de riesgo conllevaría esto. “No obstante, debido a su naturaleza persistente, la abundancia de microplásticos en los ecosistemas marinos indudablemente aumentará”.
“Es inevitable que los seres humanos que comen pescados y mariscos ingieran al menos algunos microplásticos, en particular, en el caso de las especies de las que se consume toda la carne blanda, como los mejillones, las ostras y los pescados pequeños”. ¿Qué sucede con las sardinas? Un grupo de investigadores examinó la contaminación de las sardinas y los espadines enlatados por microplásticos y mesoplásticos, que son piezas de plástico de más de un milímetro. Estudiaron 20 marcas de sardinas y espadines enlatados de 13 países en cuatro continentes y solo encontraron partículas de plástico en aproximadamente una de cada cinco. Indicaron que la disparidad podría deberse a la evisceración inadecuada de las muestras contaminadas.
Se sabe que, en los mamíferos, los microplásticos ingeridos pueden atravesar la pared intestinal, circular por todo el organismo e incluso cruzar la barrera placentaria. Entonces, ¿los microplásticos realmente llegan a los músculos de los peces, como un filete de pescado? Ese tema analizo en mi video ¿Cuánto microplástico hay en los filetes de pescado?.
Si se compara el nivel de microplásticos en la carne eviscerada con el nivel de los órganos extirpados, a veces la carne contiene un nivel más alto de microplásticos que los órganos extirpados, “lo cual resalta que la evisceración no elimina necesariamente el riesgo de ingesta de microplásticos para los consumidores”. Los investigadores detectaron microplásticos de todos los “colores, formas y tamaños en todas las muestras de músculos de los peces que analizaron”. Por lo tanto, los microplásticos sí entran a la carne. La ingesta promedio de microplásticos por consumo de pez de cabeza plana, mero, camarón, carángido o barracuda puede ser de cientos de partículas de plástico por cada porción de 300 gramos o unas cuantas decenas de partículas de plástico por cada porción de 57 gramos que podría comer un niño. “Además de las lesiones físicas causadas por la ingesta de microplásticos”, las partículas pueden liberar contaminantes absorbidos, como bifenilos polibromados (PCB) y aditivos químicos para plásticos, como el bisfenol A (BPA), que en conjunto “pueden causar trastornos endocrinos, carcinogénesis y mutagénesis” (es decir, trastornos hormonales, riesgo de cáncer y daño en el ADN). “Por lo tanto, aunque no existe una dosis tolerable estándar para la ingesta de microplásticos, ni información sobre la toxicidad exacta de diferentes tipos de plásticos en el cuerpo humano, el consumo de muchas porciones semanales [de este tipo de peces] puede poner en riesgo la salud de los consumidores, (especialmente, de los grupos vulnerables, como las embarazadas, las mujeres que amamantan y los lactantes).
En los Estados Unidos, se encontraron restos antropogénicos, es decir, materiales hechos por los seres humanos, en una cuarta parte de los peces individuales y en dos tercios de todas las especies de peces analizadas, y también en aproximadamente un tercio de las muestras individuales de mariscos. Esto demuestra que “se han infiltrado desechos artificiales en la red alimenticia marina” (la cadena alimenticia acuática), “y que incluso llegan a los seres humanos a través de los pescados y mariscos”. “Debido a que estos desechos antropogénicos se asocian a un cóctel de contaminantes, algunos de los cuales pueden transferirse a los animales cuando los ingieren, esto respalda la preocupación de que las sustancias químicas de los desechos antropogénicos quizás se transfieran a los seres humanos a través de la alimentación con pescados o mariscos, lo cual genera preguntas importantes con respecto a la bioacumulación y la bioampliación de las sustancias químicas, y las consecuencias para la salud humana”. En este estudio también se incluyeron residuos no plásticos como espumas, láminas y fibras, pero ahora sabemos que la ingestión de microplásticos “parece ser un fenómeno generalizado e ineludible” en varios moluscos, crustáceos y peces de importancia comercial.
Por lo tanto, “al ser los principales depredadores, el potencial de los seres humanos de consumir microplásticos como contaminantes en los alimentos de origen marino es real y deben considerarse sus implicaciones para la salud”. (…) “A pesar de que hay incertidumbres e incógnitas considerables, ya hay argumentos concluyentes para tomar acciones urgentes con el fin de identificar, controlar y, siempre que sea posible, eliminar las principales fuentes de (…) microplásticos antes de que lleguen a los ecosistemas marinos”.
Si quieres obtener más información sobre este tema, echa un vistazo a mis videos Contaminación por microplástico y la seguridad del pescado y ¿Existe riesgo de cáncer por microplásticos en el pescado?.
¿Qué hay de los beneficios que se proponen del consumo de pescado? Echa un vistazo a mis videos Los Omega-3 y el cuento del pescado esquimal y ¿Es el aceite de pescado solo una estafa? para saber más.