¿Qué hay de la paradoja francesa?

La denominada “paradoja francesa” es un término acuñado en los ochenta por tres hombres franceses para explicar un hallazgo peculiar. Si pones en un gráfico los casos de muerte causados por ataques del corazón y la cantidad de grasa saturada y colesterol que se consume en distintos países, pareces obtener a una línea recta. Cuantos más alimentos derivados de animales se consuman, más aumenta la tasa de mortalidad. En cambio, tal vez si logramos disminuir el consumo de carne, huevos y lácteos lo suficiente podríamos bajar las tasas de mortalidad por enfermedades coronarias a cero.

Como dije en mi video ¿Cómo explicar la paradoja francesa?, dos países no se encontraban en la línea recta que mencioné. Finlandia parecía tener peores resultados de lo esperado, y Francia parecía tener mejores resultados de lo esperado. De ahí que se hable de la existencia de esta paradoja. ¿Cómo es posible que Francia tenga un consumo de grasa saturada y colesterol similar al de Finlandia, pero cinco veces menos ataques al corazón fatales?

Todos tenían sus teorías favoritas para explicar la paradoja. ¿Era el vino? ¿Eran las cenas? Sí, los alimentos de origen animal estaban asociados con la mortalidad causada por enfermedades coronarias del corazón, pero los alimentos de origen vegetal parecían protectores. Así que, ¿tal vez el hecho de que los franceses comieran cuatro veces más vegetales ayuda a explicar sus bajas tasas de mortalidad?

Bueno, parece ser que no hay ninguna paradoja. Como Marion Nestle astutamente explicó, los franceses comenzaron a alimentarse de manera poco saludable muy recientemente y las enfermedades crónicas tardan décadas en desarrollarse. Los estadounidenses han estado comiendo así por más 40 años, mientras que los franceses apenas están empezando. Si todos comenzáramos a fumar hoy y no encontráramos un incremento significativo en el cáncer de pulmón mañana, eso no significaría que fumar no causa cáncer, solo que este necesita tiempo para desarrollarse. 

¿Qué pasa cuando se hacen los cálculos de verdad? Si se comparan la tasa de mortalidad por enfermedad coronaria contra la cantidad de grasa animal y los niveles de colesterol en esa época, se puede ver que Francia sí parecía estar excepcionalmente protegida. Y, si se comparan las tasas de mortalidad con lo que estaban comiendo dos décadas antes, siguen estando muy lejos de la línea recta. ¿Cómo es eso posible? Resulta que, de acuerdo a una investigación realizada por la Organización Mundial de la Salud, los doctores franceses registran hasta un 20% menos muertes causadas por enfermedades cardiacas isquémicas en los certificados de defunción de las que en realidad suceden.

Así que, teniendo esto en cuenta, Francia básicamente pasaría a situarse en la línea que relaciona la tasa de mortalidad con la grasa animal y el colesterol, con una tasa de ataques cardíacos fatales cuatro veces mayor que la de Japón décadas después de que aumentase cuatro veces el consumo de grasa animal.  

Si te estás haciendo preguntas sobre esos metaanálisis que muestran que la grasa saturada no está asociada con la enfermedad y pensaste que ya puedes comer mantequilla, lo has adivinado, tengo videos para ti: Los estudios de grasa saturada: ajustados para fallar y Estudios sobre grasa saturada: enmantecando al público.

¿Y qué pasa con los estudios de la industria del huevo que afirman que el colesterol dietético es benigno? Puedes ver ¿Importa el tamaño del cholesterol? y Cómo el Cómite del Huevo diseña estudios engañosos para más información sobre esto.  

¿Estabas esperando que los bajos índices de ataques de corazón en Francia fueran gracias al consumo de vino tinto? ¿Qué hay del resveratrol de las cáscaras de uva? Puedes ver El resveratrol disminuye los beneficios del ejercicio y La mejor fuente de resveratrol.

Y, para ver un resumen sobre la enfermedad cardíaca, puedes consultar: No morir de enfermedad cardíaca.