La traducción de este texto viene de la mano de nuestra voluntaria María José.
¿Qué tan efectiva es la quimioterapia para el cáncer de colon, de pulmón, de mama y de próstata?
“Durante las últimas décadas… la medicina ha librado una gran guerra contra el cáncer, concentrándose en un diagnóstico más temprano y en una terapia mejorada. No hemos ganado la guerra. Sin embargo, la medicina muestra pocos signos de admitir que su estrategia puede ser defectuosa. En esto se parece a un general de la Primera Guerra Mundial que declaró: ‘Bajas: muchísimas. Terreno ganado: insignificante. Conclusión: seguir adelante’”.
Si examinamos la contribución de la quimioterapia que mata el cáncer a la supervivencia a cinco años de los pacientes con cáncer, veremos que es tan solo de un 2 %, aproximadamente. Como puede ver a continuación y en el punto temporal 0:50 de mi video Cómo ganar la guerra contra el cáncer, hemos llegado a obtener resultados bastante buenos en el tratamiento de algunos cánceres pediátricos, el cáncer testicular y el linfoma de Hodgkin.
Pero, si nos fijamos en los cánceres más habituales (es decir, el de colon, pulmón, mama y próstata), el índice de éxito es solo del 1 %. Eso significa que de casi 14 000 pacientes con cáncer de colon, por ejemplo, solo 146 llegaron a vivir cinco años, gracias a la quimioterapia. La probabilidad de que este tratamiento contribuya a la supervivencia es de una entre cien, pero los médicos no se lo dicen a los pacientes. “Cualquier nuevo fármaco de quimioterapia se sigue promocionando como un gran avance en la lucha contra el cáncer, y luego se rechaza en silencio, sin la fanfarria que acompañó su llegada”. De hecho, el “impacto mínimo en la supervivencia en los cánceres más comunes entra en conflicto con la percepción de muchos pacientes de estar recibiendo un tratamiento que aumentará significativamente sus posibilidades de curación… En vista del mínimo impacto de la quimioterapia citotóxica en la supervivencia a 5 años, y la falta de cualquier progreso importante en los últimos 20 años, se deduce que la función principal de este tratamiento es en la paliación”. Puede reducir tumores, y así aliviar el dolor y la presión, pero normalmente eso no implica vivir más tiempo. “El fracaso de la terapia, combinado con la constatación de que la inmensa mayoría de los cánceres están relacionados con factores ambientales, sobre todo de estilo de vida, dicta que la prevención debe ser nuestro principal objetivo”.
El cáncer se puede prevenir, en gran medida, pero requiere importantes cambios en el estilo de vida. De los millones de cánceres que se diagnostican cada año, entre el 90 y el 95 por ciento están causados por factores relacionados con el estilo de vida, y solo entre el 5 y el 10 por ciento por malos genes. Lo sabemos por las “enormes diferencias en la incidencia de determinadas formas de cáncer en distintas situaciones geográficas y socioeconómicas” por todo el mundo, que luego cambian cuando la gente se traslada de un lugar a otro. Por ejemplo, como se puede ver a continuación y en el punto 2:40 de mi video, los índices de cáncer de mama difieren en un orden de magnitud, con los más bajos en partes de África y Asia, hasta que esos africanos y asiáticos se trasladan y empiezan a comer y vivir como los estadounidenses, argentinos, europeos o australianos.
Así que “es necesario reevaluar a fondo cómo enfocamos el problema del cáncer”. La clave para ganarle la guerra es la prevención, que no solo funciona mejor, sino que “tiene la gran ventaja de que no conlleva nada peor que el síndrome de abstinencia de la nicotina [o de las gominolas]. Por otro lado, a menudo el tratamiento del cáncer, incluso cuando tiene éxito, expone al paciente a mucho sufrimiento, tanto físico como psicológico. De hecho, algunos tratamientos contra el cáncer se consideran peores que la enfermedad”.
Lo más importante es que un estilo de vida saludable puede cortar el cáncer de raíz, mientras que, por definición, el diagnóstico y el tratamiento tempranos no cambian el índice de cáncer ni el número de personas que lo padecen. En cuanto a la prevención y el tratamiento con la nutrición, el “consumo de nutrientes de los alimentos de origen animal se asoció con un mayor riesgo de cáncer, mientras que los nutrientes de los alimentos de origen vegetal se asociaron con una disminución del riesgo”. Sin embargo, no basta con evitar lo malo. Comer es prácticamente “un juego de suma cero”. Todo lo que nos metemos en la boca es una oportunidad perdida de meternos algo aún más saludable. No se trata solo de evitar los alimentos con propiedades que promueven el cáncer. Tenemos que comer alimentos con mecanismos activos de supresión del cáncer. Cuando hablamos de “nutrición holística”, nos referimos a alimentos enteros: debemos obtener sus nutrientes, no de extractos o píldoras, sino de los propios alimentos enteros.
En última instancia, “el desarrollo del cáncer es principalmente una enfermedad que responde a la nutrición, más que una enfermedad genética”, pero, de nuevo, no estamos hablando de suplementos nutricionales, sino de “alimentos enteros e intactos”.
Me alegra compartir algunos de los seis nuevos artículos del profesor emérito Colin Cambell sobre la redefinición del papel de la nutrición en la medicina.
Para obtener una visión general sobre el poder de la dieta, puedes ver mis videos Cómo no morir de cáncer y Los mejores consejos sobre la alimentación y el cáncer. He producido cientos de vídeos sobre el papel de diferentes alimentos y patrones de consumo de alimentos en diferentes tipos de cáncer. Puedes navegar por mi sitio web NutritionFacts.org con la barra de búsqueda y ver los títulos.
¿Qué hemos aprendido?
- A pesar de que estamos librando una “gran guerra contra el cáncer,” la quimioterapia solo contribuye en un 2 %, aproximadamente, a la supervivencia a cinco años en pacientes con cáncer.
- Aunque el tratamiento con quimioterapia es bastante efectivo en algunos cánceres pediátricos, el cáncer testicular y el linfoma de Hodgkin, en los cánceres que nos afectan más habitualmente (de colon, de pulmón, de mama y de próstata) el índice de éxito es de solo un 1 %: de unos 14 000 pacientes con cáncer de colon, solo 146 viven cinco años, gracias a la quimio.
- La quimioterapia puede reducir tumores y así aliviar el dolor y la presión, pero normalmente eso no implica vivir más tiempo.
- Entre el 90 y el 95 % de los cánceres están causados por factores relacionados con el nivel de vida, mientras que los malos genes solo son responsables de un 5 a un 10 %.
- La clave para ganarle la guerra al cáncer es la prevención, no el tratamiento.
- Un estilo de vida saludable puede prevenir el cáncer, mientras de un diagnóstico y tratamiento tempranos, por definición, no cambian el índice de cáncer ni el número de personas que lo padecen.
- Los alimentos de origen animal están asociados con un mayor riesgo de cáncer, mientras que los de origen vegetal se asocian con una disminución del riesgo. Deberíamos obtener nuestros nutrientes de alimentos enteros intactos de origen vegetal, y no de extractos, píldoras o suplementos.
Para aprender más sobre la medicina del estilo de vida y la revolución en la sanidad, no te pierdas estos videos:
- Medicina del estilo de vida: tratar las causas de la enfermedad
- El beneficio real de la alimentación en comparación con los fármacos
- Tu ADN no es una sentencia segura porque el estilo de vida puede prevenir enfermedades
Un saludo,
Michael Greger
- 2012: Arrancar de raíz las principales causas de muerte
- 2013: Más de una manzana al día para prevenir nuestras enfermedades más comunes
- 2014: De la mesa a estar capacitado: combatir enfermedades discapacitantes con los alimentos
- 2015: Alimentos como medicina: prevención y tratamiento de las enfermedades más temidas con alimentación
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