Friday Favorites: Tratar el reflujo en bebés con la alimentación

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Tratar el reflujo infantil eliminando la proteína de la leche de vaca de la dieta de la madre.

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Leonardo Alanís y Leslie Salas voluntarios activos en NutritionFacts.org.

Ha habido un problema desde hace tiempo entre los cuidadores de los gorilas. El nombre latino: gorila, gorila, gorila.

El problema es que vomitaban todo el tiempo. Nunca hemos visto a los gorilas salvajes vomitar pero, desafortunadamente, esto se había aceptado como rutina en muchos zoológicos. ¿Con qué los alimentaban? Bien, ya sabes que son animales grandes y fuertes, así que se aseguraron de darles mucha proteína, ya sabes, requesón, carne, huevos, leche; hasta que un zoológico en Alemania tuvo esta idea radical de intentar darles su alimentación natural. Y el cambio tras las alteraciones a su alimentación fue sorprendente. Me refiero a que antes, el pobre espalda plateada regurgitaba y vomitaba casi todo el día, pero al tercer día de consumir lo que se suponía debían comer él y los demás se curaron milagrosamente. Incluso simplemente al eliminar la leche de la alimentación de los gorilas cautivos condujo a una mejoría significativa. La leche de vaca fue históricamente considerada un elemento esencial en la alimentación de los gorilas cautivos, pero demostraron que la eliminación de la leche de su alimentación puede reducir tales comportamientos indeseables y puede ser un paso hacia una mejor aproximación a su alimentación natural. Quiero decir, ¿darle leche a un animal después del destete? ¿Darle leche a un animal adulto? ¡La leche es para los bebés! Y luego, ¿darle leche de un bovino a un primate? ¿Qué pensaban estos locos cuidadores? ¡No tiene ningún sentido!

Me recuerda este estudio trascendental. Ochenta y un niños con reflujo, enfermedad de reflujo gastroesofágico, así que les dieron medicamentos y dos tercios mejoraron, pero 27 no. Así que intentaron eliminar la leche de vaca de su alimentación y, en un mes, todos los 27 se curaron.

Los síntomas de regurgitación ácida, acidez estomacal, o ambos, ocurren al menos una vez por semana en 10 al 20 por ciento de los adultos en el mundo occidental. Y en aproximadamente el 25  por ciento de todos los infantes. Ahora, es normal que los bebés escupan de vez en cuando; no estamos hablando de eso. En realidad puede ser bastante grave. Hasta un 25% de los bebés presentan regurgitación lo suficientemente grave para que los padres busquen ayuda médica y puede ser que sean sensibles a la leche de vaca. Los síntomas de la alergia a la proteína de la leche de vaca se superponen o pueden coexistir o complicar la ERGE o reflujo. Incluso si no hay alergia formal a los productos lácteos, parece que hay algún tipo de “hipersensibilidad” a la leche de vaca entre muchos bebés y niños con reflujo severo.

Hay todo tipo de pruebas invasivas que puedes hacer como introducir bastones de prueba de pH en la garganta del pobre bebé, pero probablemente la prueba más práctica de rutina, en los consultorios pediátricos, es solo una prueba de eliminación de proteínas de la leche de vaca de la alimentación durante dos a cuatro semanas en infantes con reflujo.

La regla de oro es lo que se llama un protocolo de eliminación y re-desafío, donde se ve la resolución completa de los síntomas a través de una eliminación estricta, seguido por una recurrencia de los síntomas al reintroducir proteínas de leche de vaca. Y cuando haces eso, toma unos 200 infantes diagnosticados con reflujo y luego no solo dales una alimentación libre de leche de vaca, sino luego haz las pruebas de desafío. 85 de los 204 bebés con reflujo realmente padecían de alergia a la leche de vaca, o al menos hipersensibilidad, o algo así.

Lo que pensamos que está sucediendo es que nuestro sistema inmunológico ataca las proteínas bovinas comprensiblemente como extrañas, activando una respuesta inflamatoria, que irrita los nervios que recubren tu tracto digestivo y eso da lugar a anomalías en las contracciones rítmicas del estómago, desencadenando la regurgitación. Y no solo hablamos de los bebés alimentados con fórmula. La alergia a la proteína de la leche de vaca puede ocurrir en lactantes exclusivamente amamantados, ya que las proteínas intactas de la leche de vaca se pueden secretar en la leche materna. Si la mamá toma leche o come huevos, ésta puede entrar en su bebé. La proteína de la leche de vaca, y otras proteínas foráneas, pueden pasar a la leche materna humana. Por lo tanto, los infantes amamantados que sufren de regurgitación y vómitos pueden beneficiarse de una prueba de supresión de la leche de vaca y de los huevos de la alimentación materna.

Y de hecho, esa es ahora la recomendación de consenso de la North American and European Society for Pediatric Gastroenterology, Hepatology, and Nutrition (sociedad norteamericana y europea de gastroenterología pediátrica, hepatología y nutrición). Cada vez que presencies reflujo, primero intentemos un ensayo terapéutico, ya sea de una fórmula libre de proteínas de leche de vaca o, para los bebés amamantados, una alimentación materna estricta de eliminación de proteínas de leche de vaca. Y así, entonces, podemos potencialmente tratar la causa sin usar medicamentos innecesarios y sin duda antes de empezar a considerar cualquier cirugía antirreflujo en el pobre niño.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Credito de la imagen: noranorakatonamona vía Adobe Stock photos. La imagen ha sido modificada.

Gráficos de Avocado Video

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Leonardo Alanís y Leslie Salas voluntarios activos en NutritionFacts.org.

Ha habido un problema desde hace tiempo entre los cuidadores de los gorilas. El nombre latino: gorila, gorila, gorila.

El problema es que vomitaban todo el tiempo. Nunca hemos visto a los gorilas salvajes vomitar pero, desafortunadamente, esto se había aceptado como rutina en muchos zoológicos. ¿Con qué los alimentaban? Bien, ya sabes que son animales grandes y fuertes, así que se aseguraron de darles mucha proteína, ya sabes, requesón, carne, huevos, leche; hasta que un zoológico en Alemania tuvo esta idea radical de intentar darles su alimentación natural. Y el cambio tras las alteraciones a su alimentación fue sorprendente. Me refiero a que antes, el pobre espalda plateada regurgitaba y vomitaba casi todo el día, pero al tercer día de consumir lo que se suponía debían comer él y los demás se curaron milagrosamente. Incluso simplemente al eliminar la leche de la alimentación de los gorilas cautivos condujo a una mejoría significativa. La leche de vaca fue históricamente considerada un elemento esencial en la alimentación de los gorilas cautivos, pero demostraron que la eliminación de la leche de su alimentación puede reducir tales comportamientos indeseables y puede ser un paso hacia una mejor aproximación a su alimentación natural. Quiero decir, ¿darle leche a un animal después del destete? ¿Darle leche a un animal adulto? ¡La leche es para los bebés! Y luego, ¿darle leche de un bovino a un primate? ¿Qué pensaban estos locos cuidadores? ¡No tiene ningún sentido!

Me recuerda este estudio trascendental. Ochenta y un niños con reflujo, enfermedad de reflujo gastroesofágico, así que les dieron medicamentos y dos tercios mejoraron, pero 27 no. Así que intentaron eliminar la leche de vaca de su alimentación y, en un mes, todos los 27 se curaron.

Los síntomas de regurgitación ácida, acidez estomacal, o ambos, ocurren al menos una vez por semana en 10 al 20 por ciento de los adultos en el mundo occidental. Y en aproximadamente el 25  por ciento de todos los infantes. Ahora, es normal que los bebés escupan de vez en cuando; no estamos hablando de eso. En realidad puede ser bastante grave. Hasta un 25% de los bebés presentan regurgitación lo suficientemente grave para que los padres busquen ayuda médica y puede ser que sean sensibles a la leche de vaca. Los síntomas de la alergia a la proteína de la leche de vaca se superponen o pueden coexistir o complicar la ERGE o reflujo. Incluso si no hay alergia formal a los productos lácteos, parece que hay algún tipo de “hipersensibilidad” a la leche de vaca entre muchos bebés y niños con reflujo severo.

Hay todo tipo de pruebas invasivas que puedes hacer como introducir bastones de prueba de pH en la garganta del pobre bebé, pero probablemente la prueba más práctica de rutina, en los consultorios pediátricos, es solo una prueba de eliminación de proteínas de la leche de vaca de la alimentación durante dos a cuatro semanas en infantes con reflujo.

La regla de oro es lo que se llama un protocolo de eliminación y re-desafío, donde se ve la resolución completa de los síntomas a través de una eliminación estricta, seguido por una recurrencia de los síntomas al reintroducir proteínas de leche de vaca. Y cuando haces eso, toma unos 200 infantes diagnosticados con reflujo y luego no solo dales una alimentación libre de leche de vaca, sino luego haz las pruebas de desafío. 85 de los 204 bebés con reflujo realmente padecían de alergia a la leche de vaca, o al menos hipersensibilidad, o algo así.

Lo que pensamos que está sucediendo es que nuestro sistema inmunológico ataca las proteínas bovinas comprensiblemente como extrañas, activando una respuesta inflamatoria, que irrita los nervios que recubren tu tracto digestivo y eso da lugar a anomalías en las contracciones rítmicas del estómago, desencadenando la regurgitación. Y no solo hablamos de los bebés alimentados con fórmula. La alergia a la proteína de la leche de vaca puede ocurrir en lactantes exclusivamente amamantados, ya que las proteínas intactas de la leche de vaca se pueden secretar en la leche materna. Si la mamá toma leche o come huevos, ésta puede entrar en su bebé. La proteína de la leche de vaca, y otras proteínas foráneas, pueden pasar a la leche materna humana. Por lo tanto, los infantes amamantados que sufren de regurgitación y vómitos pueden beneficiarse de una prueba de supresión de la leche de vaca y de los huevos de la alimentación materna.

Y de hecho, esa es ahora la recomendación de consenso de la North American and European Society for Pediatric Gastroenterology, Hepatology, and Nutrition (sociedad norteamericana y europea de gastroenterología pediátrica, hepatología y nutrición). Cada vez que presencies reflujo, primero intentemos un ensayo terapéutico, ya sea de una fórmula libre de proteínas de leche de vaca o, para los bebés amamantados, una alimentación materna estricta de eliminación de proteínas de leche de vaca. Y así, entonces, podemos potencialmente tratar la causa sin usar medicamentos innecesarios y sin duda antes de empezar a considerar cualquier cirugía antirreflujo en el pobre niño.

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Credito de la imagen: noranorakatonamona vía Adobe Stock photos. La imagen ha sido modificada.

Gráficos de Avocado Video

Nota del Doctor

La dieta de las madres puede tener un efecto directo en los bebés amamantados, tal y como lo mencioné en Tratamiento de cólico del lactante cambiando la dieta de mama y Convulsiones infantiles relacionadas con el uso de espirulina de la madre.

Pero la lactancia materna es siempre lo mejor. Puedes ver La mejor fórmula infantil y Leche de Fórmula para la Obesidad Infantil.

Para más información sobre los lácteos y la salud de los niños puedes ver mis videos:

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El video fue publicado originalmente el 1 de abril de 2019.

Échale un vistazo a la página de información sobre los recursos traducidos.

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