Experimentos con transplantes fecales muestran el papel de la microbiota en el envejecimiento

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Las heces de centenarios tienen efectos antienvejecimiento al ser administradas a ratones

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Viviana García voluntaria activa en NutritionFacts.org.

Los investigadores de longevidad tienen razón en sospechar un papel causal, en lugar de circunstante, en los cambios del microbioma relacionados con la edad. Un tema unificador que surge de algunos modelos mejor estudiados del envejecimiento es el papel central de los intestinos como determinante crítico en la esperanza de vida. En C. elegans, la expresión de un gen de longevidad en los nervios de los animales produjo una modesta (10 por ciento) extensión de la vida y en sus músculos no tuvo ningún efecto en la prolongación de la vida. Sin embargo, expresado en sus intestinos, aumentó la esperanza de vida entre 50 y 60 por ciento.

En moscas de la fruta, los cambios por la edad en sus microbiomas intestinales preceden una pérdida de función de barrera intestinal que termina causando la muerte. La esperanza de vida de unas moscas se puede predecir con esta permeabilidad intestinal. ¿Cómo sabemos si sus microbiomas tienen algo que ver? Porque si les das a moscas de 10 días de edad el equivalente a un trasplante fecal de una mosca de 30 días, su joven intestino comienza a permear y mueren antes comparadas con obtener microbiota de otra de 10 días. Sospechamos que el impulsor es el adquirir organismos malos de las moscas mayores en lugar de perder beneficiosos, ya que el tratamiento antibiótico también aumenta significativamente su esperanza de vida.

Los invertebrados son una cosa. ¿Qué pasa con un animal con columna vertebral? Los killis turquesa africanos son modelos de envejecimiento populares ya que naturalmente solo viven pocos meses, permitiendo plazos experimentales rápidos. ¿Qué pasa cuando re-colonizas los intestinos de peces de mediana edad con bacterias de peces más jóvenes? Viven vidas más prolongadas. Y fueron significativamente más activos más tarde, en términos de comportamiento exploratorio espontáneo. Así que, al menos en los killis turquesa africanos, los cambios del microbioma con la edad parecen no solo una consecuencia pasiva de envejecer, sino un impulsor activo del proceso de envejecimiento.

Cuando solo les dieron antibióticos a los peces de mediana edad para eliminar por completo su flora intestinal, también vivieron más, sugiriendo que organismos malos limitaban su esperanza de vida, pero no vivieron tanto como los peces trasplantados con las heces de peces más jóvenes. Así que, pareció haber un efecto beneficioso de los organismos buenos de juventud. ¿Qué pasa cuando se hace lo contrario y les das a los peces jóvenes el microbioma de peces mayores? Supuestamente, vivirían vidas más cortas, ¿cierto? Pero no, no pasa nada. Es interesante. Los investigadores sugieren que la combinación letal es, por lo tanto, un sistema inmune envejecido enfrentando un microbioma envejecido. El pez joven puede ser capaz de tolerar el microbioma envejecido porque su sistema inmune juvenil lo puede remodelar.

¿Qué pasa en los mamíferos? La esperanza de vida de los ratones libres de microbios, aquellos sin microbioma intestinal y criados libres de gérmenes como “Bubble Boy”, aumenta hasta un 50 por ciento. Parecen estar protegidos de la inflamación por vejez, el aumento de la inflamación sistémica al envejecer. ¿Son culpables los organismos intestinales de ese aumento inflamatorio? Aparentemente, pues al comparar el dar a ratones libres de microbios la caca de ratones jóvenes, la caca de ratones viejos causó intestino permeable, toxinas bacterianas a desbordarse en el torrente sanguíneo y el desarrollo de inflamación en todo el sistema.

Con estudios de trasplantes fecales podemos probar el papel del microbioma intestinal en los procesos de las enfermedades. Si el individuo A tiene la enfermedad X y puedes confiadamente causar la enfermedad X en un individuo sano B con solo transferir materia fecal del intestino de A al de B, entonces puedes concluir que el microbioma juega un papel causante de la enfermedad. Por razones éticas, esta clase de estudios no se realizan en personas. Lo único que podemos hacer es transferir atributos positivos del microbioma. Entonces, ¿cómo, podemos determinar si el estado de una enfermedad está relacionado con el microbioma? El método más común es suministrar heces de pacientes afectados a ratones libres de microbios y ver cómo les compara con los libres de microbios que ingirieron heces de personas sanas como grupo de control.

Ha habido al menos 38 de estos experimentos publicados y en 36 (¡95 por ciento!) se halló que la patología se pudo transferir con la caca. Este fue el caso hasta para condiciones que no se pensó fueran relacionadas con el intestino. Por ejemplo, si alimentas a ratones libres de microbios del pañal de un bebé con alergia a la leche, los ratones terminan con alergia a la leche. Quizá nuestro microbioma intestinal ayuda a explicar tanto aumento en la prevalencia de alergias alimentarias en décadas recientes. A pesar de todo, ¿qué pasaría si se usa este modelo para explorar el papel de la flora intestinal al envejecer?

El excremento centenario tiene efectos antienvejecimiento al dárselo a ratones. Investigadores forzaron a ingerir materia fecal de un anciano (70 años), en la que hallaron Bilophila wadsworthia, una bacteria proinflamatoria enriquecida por una dieta rica en productos animales, frente a heces de un anciano de 101 años que contenía más alimentadores de fibra. Los ratones trasplantados con el microbioma centenario resultaron mostrando un rango de indicadores fisiológicos juveniles, que incluyen menos pigmento de edad en sus cerebros. Esto genera la posibilidad de que un día usaremos materia fecal centenaria para promover un envejecimiento sano. ¿Por qué bañarse en la sangre de vírgenes cuando puedes cenar con excremento de los venerables?

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Viviana García voluntaria activa en NutritionFacts.org.

Los investigadores de longevidad tienen razón en sospechar un papel causal, en lugar de circunstante, en los cambios del microbioma relacionados con la edad. Un tema unificador que surge de algunos modelos mejor estudiados del envejecimiento es el papel central de los intestinos como determinante crítico en la esperanza de vida. En C. elegans, la expresión de un gen de longevidad en los nervios de los animales produjo una modesta (10 por ciento) extensión de la vida y en sus músculos no tuvo ningún efecto en la prolongación de la vida. Sin embargo, expresado en sus intestinos, aumentó la esperanza de vida entre 50 y 60 por ciento.

En moscas de la fruta, los cambios por la edad en sus microbiomas intestinales preceden una pérdida de función de barrera intestinal que termina causando la muerte. La esperanza de vida de unas moscas se puede predecir con esta permeabilidad intestinal. ¿Cómo sabemos si sus microbiomas tienen algo que ver? Porque si les das a moscas de 10 días de edad el equivalente a un trasplante fecal de una mosca de 30 días, su joven intestino comienza a permear y mueren antes comparadas con obtener microbiota de otra de 10 días. Sospechamos que el impulsor es el adquirir organismos malos de las moscas mayores en lugar de perder beneficiosos, ya que el tratamiento antibiótico también aumenta significativamente su esperanza de vida.

Los invertebrados son una cosa. ¿Qué pasa con un animal con columna vertebral? Los killis turquesa africanos son modelos de envejecimiento populares ya que naturalmente solo viven pocos meses, permitiendo plazos experimentales rápidos. ¿Qué pasa cuando re-colonizas los intestinos de peces de mediana edad con bacterias de peces más jóvenes? Viven vidas más prolongadas. Y fueron significativamente más activos más tarde, en términos de comportamiento exploratorio espontáneo. Así que, al menos en los killis turquesa africanos, los cambios del microbioma con la edad parecen no solo una consecuencia pasiva de envejecer, sino un impulsor activo del proceso de envejecimiento.

Cuando solo les dieron antibióticos a los peces de mediana edad para eliminar por completo su flora intestinal, también vivieron más, sugiriendo que organismos malos limitaban su esperanza de vida, pero no vivieron tanto como los peces trasplantados con las heces de peces más jóvenes. Así que, pareció haber un efecto beneficioso de los organismos buenos de juventud. ¿Qué pasa cuando se hace lo contrario y les das a los peces jóvenes el microbioma de peces mayores? Supuestamente, vivirían vidas más cortas, ¿cierto? Pero no, no pasa nada. Es interesante. Los investigadores sugieren que la combinación letal es, por lo tanto, un sistema inmune envejecido enfrentando un microbioma envejecido. El pez joven puede ser capaz de tolerar el microbioma envejecido porque su sistema inmune juvenil lo puede remodelar.

¿Qué pasa en los mamíferos? La esperanza de vida de los ratones libres de microbios, aquellos sin microbioma intestinal y criados libres de gérmenes como “Bubble Boy”, aumenta hasta un 50 por ciento. Parecen estar protegidos de la inflamación por vejez, el aumento de la inflamación sistémica al envejecer. ¿Son culpables los organismos intestinales de ese aumento inflamatorio? Aparentemente, pues al comparar el dar a ratones libres de microbios la caca de ratones jóvenes, la caca de ratones viejos causó intestino permeable, toxinas bacterianas a desbordarse en el torrente sanguíneo y el desarrollo de inflamación en todo el sistema.

Con estudios de trasplantes fecales podemos probar el papel del microbioma intestinal en los procesos de las enfermedades. Si el individuo A tiene la enfermedad X y puedes confiadamente causar la enfermedad X en un individuo sano B con solo transferir materia fecal del intestino de A al de B, entonces puedes concluir que el microbioma juega un papel causante de la enfermedad. Por razones éticas, esta clase de estudios no se realizan en personas. Lo único que podemos hacer es transferir atributos positivos del microbioma. Entonces, ¿cómo, podemos determinar si el estado de una enfermedad está relacionado con el microbioma? El método más común es suministrar heces de pacientes afectados a ratones libres de microbios y ver cómo les compara con los libres de microbios que ingirieron heces de personas sanas como grupo de control.

Ha habido al menos 38 de estos experimentos publicados y en 36 (¡95 por ciento!) se halló que la patología se pudo transferir con la caca. Este fue el caso hasta para condiciones que no se pensó fueran relacionadas con el intestino. Por ejemplo, si alimentas a ratones libres de microbios del pañal de un bebé con alergia a la leche, los ratones terminan con alergia a la leche. Quizá nuestro microbioma intestinal ayuda a explicar tanto aumento en la prevalencia de alergias alimentarias en décadas recientes. A pesar de todo, ¿qué pasaría si se usa este modelo para explorar el papel de la flora intestinal al envejecer?

El excremento centenario tiene efectos antienvejecimiento al dárselo a ratones. Investigadores forzaron a ingerir materia fecal de un anciano (70 años), en la que hallaron Bilophila wadsworthia, una bacteria proinflamatoria enriquecida por una dieta rica en productos animales, frente a heces de un anciano de 101 años que contenía más alimentadores de fibra. Los ratones trasplantados con el microbioma centenario resultaron mostrando un rango de indicadores fisiológicos juveniles, que incluyen menos pigmento de edad en sus cerebros. Esto genera la posibilidad de que un día usaremos materia fecal centenaria para promover un envejecimiento sano. ¿Por qué bañarse en la sangre de vírgenes cuando puedes cenar con excremento de los venerables?

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