¿Causa esquizofrenia el toxoplasma?

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Se considera que un parásito cerebral podría ser “uno de los mayores factores de riesgo para la esquizofrenia”.

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Daniela Wiegrebe y Leslie Salas voluntarios activos en NutritionFacts.org.

El toxoplasma es un parásito cerebral que infecta a cerca de un tercio de la población en países desarrollados; aproximadamente uno de cada cuatro adultos en los Estados Unidos. Sin embargo, la presencia de por vida de estadios inactivos de este parásito en el cerebro y los músculos de los humanos infectados generalmente se considera asintomática desde el punto de vista clínico. Hay una cierta “interacción dinámica entre el parásito, el cerebro y nuestra respuesta inmune que resulta en una distensión que promueve la persistencia del parásito en nuestros cerebros durante toda la vida”. No podemos deshacernos de él, pero al menos podemos evitar que nos mate; a menos que tengamos SIDA o algo así y nuestro sistema inmune esté comprometido.

“Sin embargo, en los últimos 10 años, muchos estudios independientes han demostrado que esta enfermedad parasitaria podría ser indirectamente responsable de cientos de miles de muertes debido a sus efectos en la tasa de accidentes ocupacionales y de tráfico, y también de suicidios. Además, la toxoplasmosis latente es probablemente uno de los factores de riesgo más importantes en el desarrollo de la esquizofrenia”.

La esquizofrenia tiene un fuerte componente genético, pero incluso si tuvieras exactamente los mismos genes que una persona con esquizofrenia (si tu gemelo idéntico tuviera esquizofrenia), la probabilidad de que tú también sufrieras esquizofrenia es menor al 50 por ciento. Pero, ¿qué otros factores podrían aumentar tu riesgo? Estudios realizados durante cinco décadas en 20 países encontraron que la infección por toxoplasma casi triplica la probabilidad de sufrir esquizofrenia. El efecto es más grande que el de cualquier otro gen asociado con la esquizofrenia que se haya descrito hasta ahora. Ahora bien, no todos los que tienen este parásito en el cerebro sufren esquizofrenia. Puede depender la región exacta del cerebro en la que el parásito termine por establecerse, pero un aumento en la prevalencia de toxoplasma en pacientes con esquizofrenia se ha demostrado en al menos 50 estudios publicados. Sí, pero ¿qué hay de los estudios que no se publicaron? Tal vez los que no encontraron ninguna conexión fueron simplemente archivados. Sin embargo, incluso teniendo en cuenta este posible sesgo en la publicación, “la evidencia de una asociación entre la esquizofrenia y el toxoplasma parece abrumadora”.

Sí, pero sigue siendo solo una asociación. Qué tal si, en lugar de que el toxoplasma cause esquizofrenia, tal vez la esquizofrenia cause el toxoplasma. Por ejemplo, es posible que los pacientes psiquiátricos institucionalizados sean alimentados con carne poco cocida, lo que aumentaría su exposición a la infección por toxoplasma. Ahí es donde entran los estudios militares. La milicia estadounidense recolecta y almacena rutinariamente la sangre de sus miembros en servicio. Esto brinda una oportunidad única para detectar las infecciones mucho antes de que se diagnostique de la enfermedad. Así, se puede ver cuál fue el primero. Y parece ser que primero aparece el toxoplasma: la infección se puede encontrar antes del inicio de los síntomas psicóticos.

“La evidencia más sólida de que el toxoplasma juega un papel de causa y efecto en la esquizofrenia proviene de un estudio reciente de resonancia magnética, que muestra que las diferencias en la estructura cerebral que originalmente se consideraron características de los pacientes con esquizofrenia, en realidad solo estaban presentes en las personas infectadas con el parásito”. Como ves, existen ciertas anomalías de la materia gris que se encuentran con más frecuencia en los pacientes con esquizofrenia, pero cuando se dividen en aquellas que dan positivo y negativo para el toxoplasma, solo se ven en los cerebros infectados. Entonces, ¿eso significa que podríamos ser capaces de tratar la esquizofrenia con medicamentos antiparasitarios?

Bueno, existe un medicamento parecido a la tetraciclina que puede eliminar el toxoplasma en ratones, y cuando se administra en pacientes con esquizofrenia parece mejorar los síntomas, pero el medicamento también puede tener propiedades antiinflamatorias y neuroprotectoras independientes. Entonces, no sabemos si la mejoría se debe a la eliminación del toxoplasma. “Investigaciones futuras deberían buscar delinear el efecto antiparasitario de la minociclina …” haciendo una prueba de toxoplasma en los pacientes para ver si los medicamentos funcionan mejor en aquellos que han sido infectados. Se han realizado cuatro ensayos controlados aleatorios que evalúan específicamente los fármacos antiparasitarios en pacientes con esquizofrenia y… no se ha encontrado ningún efecto. Pero, increíblemente, ni uno solo de esos estudios usó un medicamento que haya demostrado eliminar de forma activa a los parásitos, una vez que se han instalado en el cerebro. Verás, “después de la infección aguda, los parásitos forman quistes en el cerebro, lo que lleva al desarrollo de una infección crónica y de resistencia a los medicamentos antiparasitarios de uso común”.

“Actualmente no hay ensayos en curso sobre terapias anti-toxoplasma para la esquizofrenia, a pesar de la amplia evidencia que justifica dichas pruebas”. Si algún investigador escucha esto, espero que se dé cuenta de que ha llegado el momento de estudiar el efecto de los medicamentos antiparasitarios en pacientes infectados con toxoplasma que padecen esta terrible enfermedad.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Créditos de la imagen: Tobias Berchtold vía flickr. La imagen ha sido modificada.

Gráficos de Avocado Video

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Daniela Wiegrebe y Leslie Salas voluntarios activos en NutritionFacts.org.

El toxoplasma es un parásito cerebral que infecta a cerca de un tercio de la población en países desarrollados; aproximadamente uno de cada cuatro adultos en los Estados Unidos. Sin embargo, la presencia de por vida de estadios inactivos de este parásito en el cerebro y los músculos de los humanos infectados generalmente se considera asintomática desde el punto de vista clínico. Hay una cierta “interacción dinámica entre el parásito, el cerebro y nuestra respuesta inmune que resulta en una distensión que promueve la persistencia del parásito en nuestros cerebros durante toda la vida”. No podemos deshacernos de él, pero al menos podemos evitar que nos mate; a menos que tengamos SIDA o algo así y nuestro sistema inmune esté comprometido.

“Sin embargo, en los últimos 10 años, muchos estudios independientes han demostrado que esta enfermedad parasitaria podría ser indirectamente responsable de cientos de miles de muertes debido a sus efectos en la tasa de accidentes ocupacionales y de tráfico, y también de suicidios. Además, la toxoplasmosis latente es probablemente uno de los factores de riesgo más importantes en el desarrollo de la esquizofrenia”.

La esquizofrenia tiene un fuerte componente genético, pero incluso si tuvieras exactamente los mismos genes que una persona con esquizofrenia (si tu gemelo idéntico tuviera esquizofrenia), la probabilidad de que tú también sufrieras esquizofrenia es menor al 50 por ciento. Pero, ¿qué otros factores podrían aumentar tu riesgo? Estudios realizados durante cinco décadas en 20 países encontraron que la infección por toxoplasma casi triplica la probabilidad de sufrir esquizofrenia. El efecto es más grande que el de cualquier otro gen asociado con la esquizofrenia que se haya descrito hasta ahora. Ahora bien, no todos los que tienen este parásito en el cerebro sufren esquizofrenia. Puede depender la región exacta del cerebro en la que el parásito termine por establecerse, pero un aumento en la prevalencia de toxoplasma en pacientes con esquizofrenia se ha demostrado en al menos 50 estudios publicados. Sí, pero ¿qué hay de los estudios que no se publicaron? Tal vez los que no encontraron ninguna conexión fueron simplemente archivados. Sin embargo, incluso teniendo en cuenta este posible sesgo en la publicación, “la evidencia de una asociación entre la esquizofrenia y el toxoplasma parece abrumadora”.

Sí, pero sigue siendo solo una asociación. Qué tal si, en lugar de que el toxoplasma cause esquizofrenia, tal vez la esquizofrenia cause el toxoplasma. Por ejemplo, es posible que los pacientes psiquiátricos institucionalizados sean alimentados con carne poco cocida, lo que aumentaría su exposición a la infección por toxoplasma. Ahí es donde entran los estudios militares. La milicia estadounidense recolecta y almacena rutinariamente la sangre de sus miembros en servicio. Esto brinda una oportunidad única para detectar las infecciones mucho antes de que se diagnostique de la enfermedad. Así, se puede ver cuál fue el primero. Y parece ser que primero aparece el toxoplasma: la infección se puede encontrar antes del inicio de los síntomas psicóticos.

“La evidencia más sólida de que el toxoplasma juega un papel de causa y efecto en la esquizofrenia proviene de un estudio reciente de resonancia magnética, que muestra que las diferencias en la estructura cerebral que originalmente se consideraron características de los pacientes con esquizofrenia, en realidad solo estaban presentes en las personas infectadas con el parásito”. Como ves, existen ciertas anomalías de la materia gris que se encuentran con más frecuencia en los pacientes con esquizofrenia, pero cuando se dividen en aquellas que dan positivo y negativo para el toxoplasma, solo se ven en los cerebros infectados. Entonces, ¿eso significa que podríamos ser capaces de tratar la esquizofrenia con medicamentos antiparasitarios?

Bueno, existe un medicamento parecido a la tetraciclina que puede eliminar el toxoplasma en ratones, y cuando se administra en pacientes con esquizofrenia parece mejorar los síntomas, pero el medicamento también puede tener propiedades antiinflamatorias y neuroprotectoras independientes. Entonces, no sabemos si la mejoría se debe a la eliminación del toxoplasma. “Investigaciones futuras deberían buscar delinear el efecto antiparasitario de la minociclina …” haciendo una prueba de toxoplasma en los pacientes para ver si los medicamentos funcionan mejor en aquellos que han sido infectados. Se han realizado cuatro ensayos controlados aleatorios que evalúan específicamente los fármacos antiparasitarios en pacientes con esquizofrenia y… no se ha encontrado ningún efecto. Pero, increíblemente, ni uno solo de esos estudios usó un medicamento que haya demostrado eliminar de forma activa a los parásitos, una vez que se han instalado en el cerebro. Verás, “después de la infección aguda, los parásitos forman quistes en el cerebro, lo que lleva al desarrollo de una infección crónica y de resistencia a los medicamentos antiparasitarios de uso común”.

“Actualmente no hay ensayos en curso sobre terapias anti-toxoplasma para la esquizofrenia, a pesar de la amplia evidencia que justifica dichas pruebas”. Si algún investigador escucha esto, espero que se dé cuenta de que ha llegado el momento de estudiar el efecto de los medicamentos antiparasitarios en pacientes infectados con toxoplasma que padecen esta terrible enfermedad.

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Créditos de la imagen: Tobias Berchtold vía flickr. La imagen ha sido modificada.

Gráficos de Avocado Video

Nota del Doctor

Este es el tercer video en mi serie de cuatro videos sobre toxoplasmosis, si te perdiste los primeros dos empieza por El toxoplasma es un parásito cerebral manipulador de transmisión alimentaria y Efectos a largo plazo de la infección cerebral por toxoplasma.

Dejé algunas pistas en este video (por ejemplo: infecciones en el tejido muscular), pero mantente atento para el final: Cómo prevenir la toxoplasmosis.

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