Flashback Friday: Los beneficios del romero para la función cerebral

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Media cucharadita de romero seco puede mejorar la función cognitiva.

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba.

En el Acto 4, Escena 5 de Hamlet, Ofelia comenta que el romero es para la memoria, una idea que se remonta al menos unos miles de años hasta la antigua Grecia, donde se decía que el romero “reconforta el cerebro, agudiza el razonamiento, restablece la memoria perdida, despierta la mente…”. Después de todo, “se podría decir que las plantas son fábricas químicas que producen todo tipo de compuestos que podrían tener beneficios neuroprotectores”. Pues bien, consumamos menos alimentos procesados, y comamos muchos alimentos vegetales integrales ricos en fitonutrientes, y, por qué no, incluyamos distintas hierbas. Incluso el aroma de ciertas hierbas puede afectar nuestro funcionamiento cerebral. Desafortunadamente, gran parte de la literatura sobre aromaterapia no me ha parecido satisfactoria desde el punto de vista científico. Por ejemplo, hay estudios que ofrecen impresiones subjetivas, pero, si bien oler bolsitas con hierbas es, en efecto, “fácil, barato y seguro”, ¿es efectivo? Los investigadores ni siquiera compararon los resultados de los estudios.

Sin embargo, aun cuando hubo un grupo de control, como en un estudio en el que los investigadores les pidieron a los sujetos que realizaran una serie de pruebas en una habitación que olía a romero, a lavanda, o en una sin olor, e incluso cuando sí compararon los resultados de las pruebas, la lavanda parecía hacer que los sujetos se tomaran las cosas con más calma y eso perjudicaba su rendimiento, mientras que el grupo del cuarto con romero tuvo un mejor rendimiento. Quizás eso sucedió solo por los efectos en el estado de ánimo. Tal vez el grupo de la habitación con romero tuvo un mejor rendimiento simplemente porque el aroma les daba ánimos de alguna manera (no necesariamente positiva), o quizás, por alguna razón, el romero es sobreestimulante en algunas ocasiones.

Ahora bien, ha habido estudios que medían las ondas cerebrales y que lograron establecer una relación entre los resultados de los electroencefalogramas, y los cambios de humor y rendimiento; también pudieron asociarlos con cambios objetivos en los niveles de la hormona del estrés, pero, todo eso ¿sucede simplemente porque los aromas agradables mejoran el ánimo? Por ejemplo, si creáramos una fragancia de romero sintética usando sustancias químicas que no tuvieran nada que ver con la planta de romero, ¿tendría el mismo efecto? Lo ignorábamos… hasta ahora.

Las hierbas aromáticas tienen sustancias volátiles que, en teoría, podrían ingresar al torrente sanguíneo a través del revestimiento de la nariz o los pulmones, y que podrían pasar al cerebro y tener efectos directos. El primero en ponerlo a prueba fue un estudio realizado en 2012. Los investigadores le pidieron a los sujetos que resolvieran problemas matemáticos en un cubículo impregnado con aroma a romero. Los sujetos obtuvieron el mismo impulso en el rendimiento, pero, por primera vez, los investigadores demostraron que la mejora estaba relacionada con la cantidad del compuesto de romero que logró entrar en su torrente sanguíneo solo por el hecho de estar en la misma habitación. Esto no solo demostró que sí se absorbe, sino también que compuestos vegetales, naturales y aromáticos de ese tipo pueden tener un efecto directo en los cambios de rendimiento cerebral.

Si eso sucede solo al olerlo, ¿qué pasaría si comiéramos romero? Se han hecho estudios sobre inhalar romero y sus efectos sobre la vigilancia, cognición y niveles reducidos de la hormona del estrés. “Sin embargo, no se habían hecho estudios clínicos sobre el rendimiento cognitivo después de ingerir romero”. Hasta ahora. Se les dio a adultos mayores, de una edad promedio de 75 años, dos vasos de jugo de tomate sin romero, con media cucharadita de romero en polvo (que es lo que se usaría en una receta normal), una cucharadita, dos cucharaditas, más de una cucharada de romero en polvo, o pastillas placebo como un paso más para eliminar cualquier efecto placebo.

“La velocidad de la memoria podría ser un indicador útil de la función cognitiva en el envejecimiento”, los investigadores descubrieron que la dosis más baja tenía un efecto beneficioso, ya que aceleraba la velocidad de procesamiento de los sujetos; sin embargo, la dosis más alta la perjudicaba, quizás porque la dosis de media cucharadita mejoraba la vigilancia, mientras que la dosis de cuatro cucharaditas la reducía. Entonces, “el romero en polvo, en la dosis que más se asemeja al consumo culinario normal, tuvo efectos positivos en la velocidad de la memoria…”. La moraleja implícita es que más no siempre es mejor. No tomes dosis altas de suplementos, extractos o tinturas a base de hierbas; usarlas para sazonar es suficiente. Esta es una conclusión que, sin dudas, le cayó bien a la empresa de especias que auspició el estudio. No se encontraron efectos secundarios, pero eso no significa que te puedas comer una planta entera de romero. En un estudio, un hombre tuvo la mala suerte de tragar una ramita de romero que le perforó el estómago hasta llegar al hígado, lo que le provocó un absceso del que se removieron dos vasos de pus y una ramita de cinco centímetros. Así que presta atención a las hierbas y especias que uses al cocinar. Quita las ramitas.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Imagen: Kristina DeMuth. La imagen ha sido modificada.

Video: Tyler McReynolds, Teetotalin LLC.

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba.

En el Acto 4, Escena 5 de Hamlet, Ofelia comenta que el romero es para la memoria, una idea que se remonta al menos unos miles de años hasta la antigua Grecia, donde se decía que el romero “reconforta el cerebro, agudiza el razonamiento, restablece la memoria perdida, despierta la mente…”. Después de todo, “se podría decir que las plantas son fábricas químicas que producen todo tipo de compuestos que podrían tener beneficios neuroprotectores”. Pues bien, consumamos menos alimentos procesados, y comamos muchos alimentos vegetales integrales ricos en fitonutrientes, y, por qué no, incluyamos distintas hierbas. Incluso el aroma de ciertas hierbas puede afectar nuestro funcionamiento cerebral. Desafortunadamente, gran parte de la literatura sobre aromaterapia no me ha parecido satisfactoria desde el punto de vista científico. Por ejemplo, hay estudios que ofrecen impresiones subjetivas, pero, si bien oler bolsitas con hierbas es, en efecto, “fácil, barato y seguro”, ¿es efectivo? Los investigadores ni siquiera compararon los resultados de los estudios.

Sin embargo, aun cuando hubo un grupo de control, como en un estudio en el que los investigadores les pidieron a los sujetos que realizaran una serie de pruebas en una habitación que olía a romero, a lavanda, o en una sin olor, e incluso cuando sí compararon los resultados de las pruebas, la lavanda parecía hacer que los sujetos se tomaran las cosas con más calma y eso perjudicaba su rendimiento, mientras que el grupo del cuarto con romero tuvo un mejor rendimiento. Quizás eso sucedió solo por los efectos en el estado de ánimo. Tal vez el grupo de la habitación con romero tuvo un mejor rendimiento simplemente porque el aroma les daba ánimos de alguna manera (no necesariamente positiva), o quizás, por alguna razón, el romero es sobreestimulante en algunas ocasiones.

Ahora bien, ha habido estudios que medían las ondas cerebrales y que lograron establecer una relación entre los resultados de los electroencefalogramas, y los cambios de humor y rendimiento; también pudieron asociarlos con cambios objetivos en los niveles de la hormona del estrés, pero, todo eso ¿sucede simplemente porque los aromas agradables mejoran el ánimo? Por ejemplo, si creáramos una fragancia de romero sintética usando sustancias químicas que no tuvieran nada que ver con la planta de romero, ¿tendría el mismo efecto? Lo ignorábamos… hasta ahora.

Las hierbas aromáticas tienen sustancias volátiles que, en teoría, podrían ingresar al torrente sanguíneo a través del revestimiento de la nariz o los pulmones, y que podrían pasar al cerebro y tener efectos directos. El primero en ponerlo a prueba fue un estudio realizado en 2012. Los investigadores le pidieron a los sujetos que resolvieran problemas matemáticos en un cubículo impregnado con aroma a romero. Los sujetos obtuvieron el mismo impulso en el rendimiento, pero, por primera vez, los investigadores demostraron que la mejora estaba relacionada con la cantidad del compuesto de romero que logró entrar en su torrente sanguíneo solo por el hecho de estar en la misma habitación. Esto no solo demostró que sí se absorbe, sino también que compuestos vegetales, naturales y aromáticos de ese tipo pueden tener un efecto directo en los cambios de rendimiento cerebral.

Si eso sucede solo al olerlo, ¿qué pasaría si comiéramos romero? Se han hecho estudios sobre inhalar romero y sus efectos sobre la vigilancia, cognición y niveles reducidos de la hormona del estrés. “Sin embargo, no se habían hecho estudios clínicos sobre el rendimiento cognitivo después de ingerir romero”. Hasta ahora. Se les dio a adultos mayores, de una edad promedio de 75 años, dos vasos de jugo de tomate sin romero, con media cucharadita de romero en polvo (que es lo que se usaría en una receta normal), una cucharadita, dos cucharaditas, más de una cucharada de romero en polvo, o pastillas placebo como un paso más para eliminar cualquier efecto placebo.

“La velocidad de la memoria podría ser un indicador útil de la función cognitiva en el envejecimiento”, los investigadores descubrieron que la dosis más baja tenía un efecto beneficioso, ya que aceleraba la velocidad de procesamiento de los sujetos; sin embargo, la dosis más alta la perjudicaba, quizás porque la dosis de media cucharadita mejoraba la vigilancia, mientras que la dosis de cuatro cucharaditas la reducía. Entonces, “el romero en polvo, en la dosis que más se asemeja al consumo culinario normal, tuvo efectos positivos en la velocidad de la memoria…”. La moraleja implícita es que más no siempre es mejor. No tomes dosis altas de suplementos, extractos o tinturas a base de hierbas; usarlas para sazonar es suficiente. Esta es una conclusión que, sin dudas, le cayó bien a la empresa de especias que auspició el estudio. No se encontraron efectos secundarios, pero eso no significa que te puedas comer una planta entera de romero. En un estudio, un hombre tuvo la mala suerte de tragar una ramita de romero que le perforó el estómago hasta llegar al hígado, lo que le provocó un absceso del que se removieron dos vasos de pus y una ramita de cinco centímetros. Así que presta atención a las hierbas y especias que uses al cocinar. Quita las ramitas.

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Imagen: Kristina DeMuth. La imagen ha sido modificada.

Video: Tyler McReynolds, Teetotalin LLC.

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