El Dr. Dean Ornish demostró que un programa de alimentación a base de vegetales y estilo de vida podía, aparentemente, revertir la progresión del cáncer de próstata localizado en etapa temprana y en espera en observación. ¿Qué sucede con la enfermedad mortal en una etapa más avanzada?
Tratar el cáncer de próstata avanzado con la alimentación: parte 1
A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba.
El Dr. Dean Ornish demostró que un programa de alimentación a base de vegetales y de estilo de vida podía, aparentemente, revertir la progresión del cáncer de próstata al hacer el torrente sanguíneo de los hombres casi ocho veces más eficiente en la supresión del crecimiento de células cancerosas, pero esto fue para el cáncer de próstata localizado en etapa temprana y en espera en observación. ¿Qué sucede con la enfermedad mortal en una etapa más avanzada? Se han reportado casos esporádicos, en la literatura, que sugieren beneficios. Un hombre, por ejemplo, con enfermedad metastásica extendida, al que le dieron unos tres años de vida, inicia una alimentación estricta a base de vegetales. Cuatro años después, parece que el cáncer ha desaparecido. A los seis años, se confía y renuncia un poco a esta alimentación. El cáncer retorna en todo su furor y fallece. Pero, podría haber sido pura coincidencia. Ese es el problema con los reportes de casos, pues son solo una especie de anécdotas glorificadas, no se tiene idea de lo representativo que es el resultado, a menos que se estudie formalmente. Pero durante el siglo XX, todo lo que teníamos era este tipo de casos reportados… hasta 2001.
Así que, tuvimos esta evidencia preliminar, con base en todos los casos reportados, de que el cáncer de próstata puede ser sensible a la alimentación, incluso tras las metástasis. La alimentación puede prolongar la supervivencia e incluso causar la remisión de las metástasis óseas en hombres con enfermedad avanzada. Por lo tanto, los investigadores decidieron ponerlo a prueba, con una intervención de cuatro meses. Supusieron que demasiada grasa saturada, fibra insuficiente y demasiada carne podían ser los factores más importantes en el aumento y progresión de los tumores. Por lo tanto, le asignaron a la gente una alimentación a base de vegetales no procesados con granos enteros, legumbres, semillas y fruta. Calculando que esto sería un cambio considerable comparado con su alimentación usual, incluyeron un componente de reducción del estrés con la esperanza de mejorar la observancia alimentaria.
Bien, ¿quiénes fueron esos diez hombres? No solo tenían cáncer de próstata, sino que todos habían sido sometidos a una prostatectomía radical para eliminar su tumor primario y posteriormente presentaron niveles de PSA en aumento, indicativos de una probable metástasis. PSA significa antígeno prostático específico, solo lo generan las células de la próstata y a los diez hombres se les acababa de extirpar, por lo cual los valores deberían de ser cero. El hecho de que no solo aún tenían un poco de PSA, sino que estaba aumentando, sugiere que la cirugía falló y que el cáncer se había propagado y estaba retornando.
Aquí es donde empezaron antes de comenzar el estudio. Este es un gráfico de la velocidad con la cual subía cada uno de sus PSA. Por lo tanto, si después de cuatro meses de comer sanamente, el gráfico se veía así, significaría que la alimentación no tuvo ningún efecto. El cáncer supuestamente seguiría impulsado y propagándose tan rápido como antes pero, por el contrario, sucedió esto. En dos hombres, parece que el cáncer se aceleró, creció aún más rápido, pero en los otros ocho hombres, la intervención pareció funcionar, aparentemente desacelerando el crecimiento del cáncer y en tres, no solo se retrasó o detuvo, sino que pareció revertirse y contraerse.
¿Por qué las diferentes respuestas? Bien, en el estudio de Ornish, cuanto más acataba la gente las recomendaciones alimentarias y de estilo de vida, mejores resultado obtenían. Los cambios en la alimentación solo sirven si realmente los haces. Solo con decirle a la gente que comience una alimentación a base de vegetales no procesados no significa que los pacientes en realidad la acaten. Se puede utilizar la ingesta de fibra como un indicador de la observancia de la alimentación, ya que todos los alimentos vegetales sin procesar tienen fibra y los pacientes de Ornish casi duplicaron su ingesta de fibra de 31 a 59.
¿Cómo le fue a este grupo? Comenzaron incluso peor, con un promedio de 14 gramos al día, solo consiguiendo llegar hasta 19 gramos diarios. Esa no es una alimentación a base de vegetales no procesados, ya que ni siquiera alcanza la ingesta diaria mínima recomendada. Si nos fijamos en detalle, solo cuatro de los hombres aumentaron su ingesta de fibra. Así que eso tal vez pueda explicar las diferentes respuestas. Por ejemplo, ¿cómo le fue al paciente número dos? El hombre que más mejoró su ingesta de fibra, obtuvo el mejor resultado de PSA y el hombre cuya ingesta de fibra disminuyó más, tuvo el peor resultado de PSA. Aquí está el gráfico. Y, de hecho, parece que mientras más cambios introdujeron a su alimentación, mejores resultados obtuvieron.
Los investigadores concluyeron que una alimentación a base de vegetales, en el contexto del manejo del estrés, puede desacelerar la tasa de progresión tumoral y, a diferencia de otros tratamientos, puede otorgarles a los pacientes un poco de control sobre su enfermedad. Y, como señaló Ornish: “los únicos efectos secundarios son solo beneficiosos”.
La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Sonia Ramos y Viviana Garcia.
Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.
- Ornish D, Weidner G, Fair WR, Marlin R, Pettengill EB, Raisin CJ, Dunn-Emke S, Crutchfield L, Jacobs FN, Barnard RJ, Aronson WJ, McCormac P, McKnight DJ, Fein JD, Dnistrian AM, Weinstein J, Ngo TH, Mendell NR, Carroll PR. Intensive lifestyle changes may affect the progression of prostate cancer. J Urol. 2005 Sep;174(3):1065-9; discussion 1069-70.
- Saxe GA, Hébert JR, Carmody JF, Kabat-Zinn J, Rosenzweig PH, Jarzobski D, Reed GW, Blute RD. Can diet in conjunction with stress reduction affect the rate of increase in prostate specific antigen after biochemical recurrence of prostate cancer? J Urol. 2001 Dec;166(6):2202-7.
- Carter JP, Saxe GP, Newbold V, Peres CE, Campeau RJ, Bernal-Green L. Hypothesis: dietary management may improve survival from nutritionally linked cancers based on analysis of representative cases. J Am Coll Nutr. 1993 Jun;12(3):209-26.
Créditos de la imagen: Kristina DeMuth. La imagen ha sido modificada.
A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba.
El Dr. Dean Ornish demostró que un programa de alimentación a base de vegetales y de estilo de vida podía, aparentemente, revertir la progresión del cáncer de próstata al hacer el torrente sanguíneo de los hombres casi ocho veces más eficiente en la supresión del crecimiento de células cancerosas, pero esto fue para el cáncer de próstata localizado en etapa temprana y en espera en observación. ¿Qué sucede con la enfermedad mortal en una etapa más avanzada? Se han reportado casos esporádicos, en la literatura, que sugieren beneficios. Un hombre, por ejemplo, con enfermedad metastásica extendida, al que le dieron unos tres años de vida, inicia una alimentación estricta a base de vegetales. Cuatro años después, parece que el cáncer ha desaparecido. A los seis años, se confía y renuncia un poco a esta alimentación. El cáncer retorna en todo su furor y fallece. Pero, podría haber sido pura coincidencia. Ese es el problema con los reportes de casos, pues son solo una especie de anécdotas glorificadas, no se tiene idea de lo representativo que es el resultado, a menos que se estudie formalmente. Pero durante el siglo XX, todo lo que teníamos era este tipo de casos reportados… hasta 2001.
Así que, tuvimos esta evidencia preliminar, con base en todos los casos reportados, de que el cáncer de próstata puede ser sensible a la alimentación, incluso tras las metástasis. La alimentación puede prolongar la supervivencia e incluso causar la remisión de las metástasis óseas en hombres con enfermedad avanzada. Por lo tanto, los investigadores decidieron ponerlo a prueba, con una intervención de cuatro meses. Supusieron que demasiada grasa saturada, fibra insuficiente y demasiada carne podían ser los factores más importantes en el aumento y progresión de los tumores. Por lo tanto, le asignaron a la gente una alimentación a base de vegetales no procesados con granos enteros, legumbres, semillas y fruta. Calculando que esto sería un cambio considerable comparado con su alimentación usual, incluyeron un componente de reducción del estrés con la esperanza de mejorar la observancia alimentaria.
Bien, ¿quiénes fueron esos diez hombres? No solo tenían cáncer de próstata, sino que todos habían sido sometidos a una prostatectomía radical para eliminar su tumor primario y posteriormente presentaron niveles de PSA en aumento, indicativos de una probable metástasis. PSA significa antígeno prostático específico, solo lo generan las células de la próstata y a los diez hombres se les acababa de extirpar, por lo cual los valores deberían de ser cero. El hecho de que no solo aún tenían un poco de PSA, sino que estaba aumentando, sugiere que la cirugía falló y que el cáncer se había propagado y estaba retornando.
Aquí es donde empezaron antes de comenzar el estudio. Este es un gráfico de la velocidad con la cual subía cada uno de sus PSA. Por lo tanto, si después de cuatro meses de comer sanamente, el gráfico se veía así, significaría que la alimentación no tuvo ningún efecto. El cáncer supuestamente seguiría impulsado y propagándose tan rápido como antes pero, por el contrario, sucedió esto. En dos hombres, parece que el cáncer se aceleró, creció aún más rápido, pero en los otros ocho hombres, la intervención pareció funcionar, aparentemente desacelerando el crecimiento del cáncer y en tres, no solo se retrasó o detuvo, sino que pareció revertirse y contraerse.
¿Por qué las diferentes respuestas? Bien, en el estudio de Ornish, cuanto más acataba la gente las recomendaciones alimentarias y de estilo de vida, mejores resultado obtenían. Los cambios en la alimentación solo sirven si realmente los haces. Solo con decirle a la gente que comience una alimentación a base de vegetales no procesados no significa que los pacientes en realidad la acaten. Se puede utilizar la ingesta de fibra como un indicador de la observancia de la alimentación, ya que todos los alimentos vegetales sin procesar tienen fibra y los pacientes de Ornish casi duplicaron su ingesta de fibra de 31 a 59.
¿Cómo le fue a este grupo? Comenzaron incluso peor, con un promedio de 14 gramos al día, solo consiguiendo llegar hasta 19 gramos diarios. Esa no es una alimentación a base de vegetales no procesados, ya que ni siquiera alcanza la ingesta diaria mínima recomendada. Si nos fijamos en detalle, solo cuatro de los hombres aumentaron su ingesta de fibra. Así que eso tal vez pueda explicar las diferentes respuestas. Por ejemplo, ¿cómo le fue al paciente número dos? El hombre que más mejoró su ingesta de fibra, obtuvo el mejor resultado de PSA y el hombre cuya ingesta de fibra disminuyó más, tuvo el peor resultado de PSA. Aquí está el gráfico. Y, de hecho, parece que mientras más cambios introdujeron a su alimentación, mejores resultados obtuvieron.
Los investigadores concluyeron que una alimentación a base de vegetales, en el contexto del manejo del estrés, puede desacelerar la tasa de progresión tumoral y, a diferencia de otros tratamientos, puede otorgarles a los pacientes un poco de control sobre su enfermedad. Y, como señaló Ornish: “los únicos efectos secundarios son solo beneficiosos”.
La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Sonia Ramos y Viviana Garcia.
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- Ornish D, Weidner G, Fair WR, Marlin R, Pettengill EB, Raisin CJ, Dunn-Emke S, Crutchfield L, Jacobs FN, Barnard RJ, Aronson WJ, McCormac P, McKnight DJ, Fein JD, Dnistrian AM, Weinstein J, Ngo TH, Mendell NR, Carroll PR. Intensive lifestyle changes may affect the progression of prostate cancer. J Urol. 2005 Sep;174(3):1065-9; discussion 1069-70.
- Saxe GA, Hébert JR, Carmody JF, Kabat-Zinn J, Rosenzweig PH, Jarzobski D, Reed GW, Blute RD. Can diet in conjunction with stress reduction affect the rate of increase in prostate specific antigen after biochemical recurrence of prostate cancer? J Urol. 2001 Dec;166(6):2202-7.
- Carter JP, Saxe GP, Newbold V, Peres CE, Campeau RJ, Bernal-Green L. Hypothesis: dietary management may improve survival from nutritionally linked cancers based on analysis of representative cases. J Am Coll Nutr. 1993 Jun;12(3):209-26.
Créditos de la imagen: Kristina DeMuth. La imagen ha sido modificada.
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Tratar el cáncer de próstata avanzado con la alimentación: parte 1
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Espera, ¿hacer el torrente sanguíneo de los hombres casi ocho veces más eficiente en la supresión del crecimiento de células cancerosas? Compruébalo en: No morir de cáncer.
Sin embargo, no es todo o nada. Cualquier avance hacia una alimentación más sana puede ayudar. Ve mi video: Supervivencia del cáncer de próstata: la relación A/V.
¿Qué sucede si se repite este estudio en un nuevo grupo de pacientes, pero esta vez durante seis meses? Entérate de lo que pasó cuando los investigadores intentaron precisamente eso en mi próximo video: Tratar el cáncer de próstata avanzado con la alimentación: parte 2.
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