¿Cómo podríamos ayudar a purgar los contaminantes almacenados en nuestra grasa que se filtran al torrente sanguíneo cuando perdemos peso?
El ayuno para eliminar toxinas
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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Gerardo Piña voluntario activo en NutritionFacts.org.
La mayoría de los contaminantes industriales persistentes, como los pesticidas organoclorados como el DDT y los PCB se prohibieron hace varias décadas, y la emisión de dioxinas está estrictamente regulada. Sin embargo, seguimos expuestos a estas sustancias químicas por varias vías, la principal de las cuales son los alimentos contaminados, especialmente los productos animales grasos como el pescado, la carne y la leche. Cuando ingerimos estas sustancias químicas se almacenan principalmente en nuestro propio tejido adiposo, donde se filtran lentamente al torrente sanguíneo, pero aún más en la grasa que en el cerebro u otros órganos vitales. En realidad, tener más grasa corporal puede desempeñar una función protectora al secuestrar las toxinas, pero estas pueden salir a borbotones cuando perdemos peso.
La pérdida de peso corporal aumenta las concentraciones de contaminantes potencialmente tóxicos en las personas obesas. De los 19 contaminantes estudiados, todos aumentaron, 15 de forma significativa. Todos los estudios que lo han analizado han encontrado un aumento de los niveles sanguíneos de contaminantes tóxicos que acompañan a la pérdida de peso, ya sea inducida por una dieta o por cirugía bariátrica: aumentos de entre el 14% y el 388% con una pérdida lo suficientemente grande. Cuanto más peso se pierde, más aumentan los niveles de contaminantes porque todas esas sustancias químicas almacenadas en la grasa durante todos esos años salen al exterior.
La preocupación teórica es que si se liberan en la sangre a un ritmo más rápido del que se eliminan, los niveles de estos compuestos podrían llegar a ser tóxicos, causando efectos secundarios como sudoración, dolor de cabeza y náuseas, pero ocurrió lo contrario cuando se ayunó a pacientes intoxicados con PCB. En 1979, unas 2,000 personas de Taiwán estuvieron expuestas a través de un accidente industrial que contaminó el aceite de arroz, lo que los llevó a tener una carga de toxicidad corporal más alta que incluso los consumidores de marisco de toda la vida. Pero tras un régimen de ayuno modificado, los 16 pacientes con los que lo probaron mostraron mejoras, y algunos disfrutaron de un alivio drástico de sus padecimientos, pero esto fue tras solo unos días de ayuno; por lo tanto, no pudieron haber perdido realmente mucha grasa corporal. Además, no midieron los PCB ni antes ni después, por lo que no está claro que estuvieran experimentando algún tipo de desintoxicación, ni qué relevancia tiene esto para las personas que no han sido envenenadas de forma aguda.
El aumento inicial de los niveles de contaminantes en el primer año de pérdida de peso puede estabilizarse o disminuir con el tiempo. Echa un vistazo a lo que ocurrió en Biosfera 2, un experimento notable diseñado para ser un ecosistema completamente cerrado, el período más largo sostenido de seres humanos aislados en un entorno confinado que se haya registrado, pero debido a las malas cosechas, se convirtió en un experimento de 2 años de restricción calórica. Todos perdieron alrededor de 11 kilos en los primeros 6 meses y se estabilizaron ahí, y aunque los niveles de PCB y un metabolito del DDT conocido como DDE subieron inicialmente, parecieron empezar a bajar de nuevo, pero ese pico inicial es todo un salto. Esa es una de las razones por las que las autoridades sanitarias recomiendan a las mujeres que no intenten adelgazar durante la lactancia. Por ejemplo, esta es una mujer cuyos niveles de leche materna aumentaron después de ayunar y perder unos 9 kilos.
Dado que la grasa se moviliza en la leche materna, la secreción de esta es una de las principales vías de eliminación de estos contaminantes del organismo de la madre. A pesar de todo, la lactancia materna sigue siendo lo mejor, pero puede mantener sus niveles más bajos si la mujer no se esfuerza por perder peso hasta que termine la lactancia.
¿Qué se puede hacer para ayudar a eliminar los contaminantes durante la pérdida de peso? Una de las razones por las que los niveles de contaminantes en los sujetos de la biosfera disminuyeron con el tiempo es porque estaban comiendo una dieta rica en fibra centrada en frutas, granos enteros, frijoles, nueces y verduras, y sabemos que la fibra puede unirse a estos contaminantes y potencialmente eliminarlos del cuerpo. Por lo tanto, al perder peso, comer muchos cereales integrales puede ser importante para aumentar la eliminación de contaminantes y, por supuesto, reducir la grasa animal, incluido el pescado, para no acumular más al mismo tiempo.
¿Y si solo comemos Pringles? ¿Cuál fue la intervención dietética en este ensayo aleatorio para disminuir la carga corporal de contaminantes? Los sujetos fueron asignados aleatoriamente a 24 Pringles sin grasa al día o a Pringles normales. ¡¿Qué?! ¿Por qué? Todo empezó con este loco informe de un caso de un tipo fuertemente contaminado por PCBs que consiguió deshacerse del 90 por ciento al adelgazar comiendo papas fritas hechas con la falsa grasa olestra, que no se absorbe, y así parece que saca los contaminantes del torrente sanguíneo a las heces para su eliminación. Funciona en ratones, aumentando la excreción de hexaclorobenceno 30 veces y reduciendo los niveles en sus cerebros a la mitad, pero en las personas, la caída de los niveles de PCB en sangre con las Pringles de olestra no fue estadística ni significativamente mayor, y por alguna razón, los niveles de colesterol malo LDL se dispararon 28 puntos en el grupo de olestra. Y, aunque la olestra y fármacos como la colestiramina pueden absorber contaminantes y eliminarlos del organismo, también pueden hacer que se pierdan vitaminas liposolubles. Así que, para conseguir lo mejor de ambos mundos, perder contaminación sin perder vitaminas, los alimentos ricos en fibra pueden ser nuestra mejor opción.
En lugar de tomar suplementos de olestra para desintoxicarse, por qué no intentar no ingerir tantas toxinas desde el principio.
Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.
- Lupton SJ, O’Keefe M, Muñiz-Ortiz JG, Clinch N, Basu P. Survey of polychlorinated dibenzo-p-dioxins, polychlorinated dibenzofurans and non-ortho-polychlorinated biphenyls in US meat and poultry, 2012-13: toxic equivalency levels, patterns, temporal trends and implications. Food Addit Contam Part A Chem Anal Control Expo Risk Assess. 2017;34(11):1970-1981.
- Chevrier J, Dewailly E, Ayotte P, Mauriège P, Després JP, Tremblay A. Body weight loss increases plasma and adipose tissue concentrations of potentially toxic pollutants in obese individuals. Int J Obes Relat Metab Disord. 2000;24(10):1272-1278.
- Subramanian S, Chait A. The effect of dietary cholesterol on macrophage accumulation in adipose tissue: implications for systemic inflammation and atherosclerosis. Curr Opin Lipidol. 2009;20(1):39-44.
- Morgan-Bathke ME, Jensen MD. Preliminary evidence for reduced adipose tissue inflammation in vegetarians compared with omnivores. Nutr J. 2019;18(1):45.
- Ryu TY, Park J, Scherer PE. Hyperglycemia as a risk factor for cancer progression. Diabetes Metab J. 2014;38(5):330-336.
- Klein AV, Kiat H. Detox diets for toxin elimination and weight management: a critical review of the evidence. J Hum Nutr Diet. 2015;28(6):675-686.
- Dirtu AC, Dirinck E, Malarvannan G, et al. Dynamics of organohalogenated contaminants in human serum from obese individuals during one year of weight loss treatment. Environ Sci Technol. 2013;47(21):12441-12449.
- Ravussin E, Redman LM, Rochon J, et al. A 2-year randomized controlled trial of human caloric restriction: feasibility and effects on predictors of health span and longevity. J Gerontol A Biol Sci Med Sci. 2015;70(9):1097-1104.
- Mercken EM, Crosby SD, Lamming DW, et al. Calorie restriction in humans inhibits the PI3K/AKT pathway and induces a younger transcription profile. Aging Cell. 2013;12(4):645-651.
- Tannenbaum A, Silverstone H. Nutrition in relation to cancer. Adv Cancer Res. 1953;1:451-501.
- Lankelma J, Kooi B, Krab K, Dorsman JC, Joenje H, Westerhoff HV. A reason for intermittent fasting to suppress the awakening of dormant breast tumors. Biosystems. 2015;127:1-6.
- Walford RL, Harris SB, Gunion MW. The calorically restricted low-fat nutrient-dense diet in Biosphere 2 significantly lowers blood glucose, total leukocyte count, cholesterol, and blood pressure in humans. Proc Natl Acad Sci U S A. 1992;89(23):11533-11537.
- Sera N, Morita K, Nagasoe M, Tokieda H, Kitaura T, Tokiwa H. Binding effect of polychlorinated compounds and environmental carcinogens on rice bran fiber. J Nutr Biochem. 2005;16(1):50-58.
- Jandacek RJ, Heubi JE, Buckley DD, et al. Reduction of the body burden of PCBs and DDE by dietary intervention in a randomized trial. J Nutr Biochem. 2014;25(4):483-488.
- Redgrave TG, Wallace P, Jandacek RJ, Tso P. Treatment with a dietary fat substitute decreased Arochlor 1254 contamination in an obese diabetic male. J Nutr Biochem. 2005;16(6):383-384.
- Geusau A, Tschachler E, Meixner M, et al. Olestra increases faecal excretion of 2,3,7,8-tetrachlorodibenzo-p-dioxin. Lancet. 1999;354(9186):1266-1267.
- Jandacek RJ, Anderson N, Liu M, Zheng S, Yang Q, Tso P. Effects of yo-yo diet, caloric restriction, and olestra on tissue distribution of hexachlorobenzene. Am J Physiol Gastrointest Liver Physiol. 2005;288(2):G292-299.
- Arguin H, Sánchez M, Bray GA, et al. Impact of adopting a vegan diet or an olestra supplementation on plasma organochlorine concentrations: results from two pilot studies. Br J Nutr. 2010;103(10):1433-1441.
Gráficos de Avo Media
A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Gerardo Piña voluntario activo en NutritionFacts.org.
La mayoría de los contaminantes industriales persistentes, como los pesticidas organoclorados como el DDT y los PCB se prohibieron hace varias décadas, y la emisión de dioxinas está estrictamente regulada. Sin embargo, seguimos expuestos a estas sustancias químicas por varias vías, la principal de las cuales son los alimentos contaminados, especialmente los productos animales grasos como el pescado, la carne y la leche. Cuando ingerimos estas sustancias químicas se almacenan principalmente en nuestro propio tejido adiposo, donde se filtran lentamente al torrente sanguíneo, pero aún más en la grasa que en el cerebro u otros órganos vitales. En realidad, tener más grasa corporal puede desempeñar una función protectora al secuestrar las toxinas, pero estas pueden salir a borbotones cuando perdemos peso.
La pérdida de peso corporal aumenta las concentraciones de contaminantes potencialmente tóxicos en las personas obesas. De los 19 contaminantes estudiados, todos aumentaron, 15 de forma significativa. Todos los estudios que lo han analizado han encontrado un aumento de los niveles sanguíneos de contaminantes tóxicos que acompañan a la pérdida de peso, ya sea inducida por una dieta o por cirugía bariátrica: aumentos de entre el 14% y el 388% con una pérdida lo suficientemente grande. Cuanto más peso se pierde, más aumentan los niveles de contaminantes porque todas esas sustancias químicas almacenadas en la grasa durante todos esos años salen al exterior.
La preocupación teórica es que si se liberan en la sangre a un ritmo más rápido del que se eliminan, los niveles de estos compuestos podrían llegar a ser tóxicos, causando efectos secundarios como sudoración, dolor de cabeza y náuseas, pero ocurrió lo contrario cuando se ayunó a pacientes intoxicados con PCB. En 1979, unas 2,000 personas de Taiwán estuvieron expuestas a través de un accidente industrial que contaminó el aceite de arroz, lo que los llevó a tener una carga de toxicidad corporal más alta que incluso los consumidores de marisco de toda la vida. Pero tras un régimen de ayuno modificado, los 16 pacientes con los que lo probaron mostraron mejoras, y algunos disfrutaron de un alivio drástico de sus padecimientos, pero esto fue tras solo unos días de ayuno; por lo tanto, no pudieron haber perdido realmente mucha grasa corporal. Además, no midieron los PCB ni antes ni después, por lo que no está claro que estuvieran experimentando algún tipo de desintoxicación, ni qué relevancia tiene esto para las personas que no han sido envenenadas de forma aguda.
El aumento inicial de los niveles de contaminantes en el primer año de pérdida de peso puede estabilizarse o disminuir con el tiempo. Echa un vistazo a lo que ocurrió en Biosfera 2, un experimento notable diseñado para ser un ecosistema completamente cerrado, el período más largo sostenido de seres humanos aislados en un entorno confinado que se haya registrado, pero debido a las malas cosechas, se convirtió en un experimento de 2 años de restricción calórica. Todos perdieron alrededor de 11 kilos en los primeros 6 meses y se estabilizaron ahí, y aunque los niveles de PCB y un metabolito del DDT conocido como DDE subieron inicialmente, parecieron empezar a bajar de nuevo, pero ese pico inicial es todo un salto. Esa es una de las razones por las que las autoridades sanitarias recomiendan a las mujeres que no intenten adelgazar durante la lactancia. Por ejemplo, esta es una mujer cuyos niveles de leche materna aumentaron después de ayunar y perder unos 9 kilos.
Dado que la grasa se moviliza en la leche materna, la secreción de esta es una de las principales vías de eliminación de estos contaminantes del organismo de la madre. A pesar de todo, la lactancia materna sigue siendo lo mejor, pero puede mantener sus niveles más bajos si la mujer no se esfuerza por perder peso hasta que termine la lactancia.
¿Qué se puede hacer para ayudar a eliminar los contaminantes durante la pérdida de peso? Una de las razones por las que los niveles de contaminantes en los sujetos de la biosfera disminuyeron con el tiempo es porque estaban comiendo una dieta rica en fibra centrada en frutas, granos enteros, frijoles, nueces y verduras, y sabemos que la fibra puede unirse a estos contaminantes y potencialmente eliminarlos del cuerpo. Por lo tanto, al perder peso, comer muchos cereales integrales puede ser importante para aumentar la eliminación de contaminantes y, por supuesto, reducir la grasa animal, incluido el pescado, para no acumular más al mismo tiempo.
¿Y si solo comemos Pringles? ¿Cuál fue la intervención dietética en este ensayo aleatorio para disminuir la carga corporal de contaminantes? Los sujetos fueron asignados aleatoriamente a 24 Pringles sin grasa al día o a Pringles normales. ¡¿Qué?! ¿Por qué? Todo empezó con este loco informe de un caso de un tipo fuertemente contaminado por PCBs que consiguió deshacerse del 90 por ciento al adelgazar comiendo papas fritas hechas con la falsa grasa olestra, que no se absorbe, y así parece que saca los contaminantes del torrente sanguíneo a las heces para su eliminación. Funciona en ratones, aumentando la excreción de hexaclorobenceno 30 veces y reduciendo los niveles en sus cerebros a la mitad, pero en las personas, la caída de los niveles de PCB en sangre con las Pringles de olestra no fue estadística ni significativamente mayor, y por alguna razón, los niveles de colesterol malo LDL se dispararon 28 puntos en el grupo de olestra. Y, aunque la olestra y fármacos como la colestiramina pueden absorber contaminantes y eliminarlos del organismo, también pueden hacer que se pierdan vitaminas liposolubles. Así que, para conseguir lo mejor de ambos mundos, perder contaminación sin perder vitaminas, los alimentos ricos en fibra pueden ser nuestra mejor opción.
En lugar de tomar suplementos de olestra para desintoxicarse, por qué no intentar no ingerir tantas toxinas desde el principio.
Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.
- Lupton SJ, O’Keefe M, Muñiz-Ortiz JG, Clinch N, Basu P. Survey of polychlorinated dibenzo-p-dioxins, polychlorinated dibenzofurans and non-ortho-polychlorinated biphenyls in US meat and poultry, 2012-13: toxic equivalency levels, patterns, temporal trends and implications. Food Addit Contam Part A Chem Anal Control Expo Risk Assess. 2017;34(11):1970-1981.
- Chevrier J, Dewailly E, Ayotte P, Mauriège P, Després JP, Tremblay A. Body weight loss increases plasma and adipose tissue concentrations of potentially toxic pollutants in obese individuals. Int J Obes Relat Metab Disord. 2000;24(10):1272-1278.
- Subramanian S, Chait A. The effect of dietary cholesterol on macrophage accumulation in adipose tissue: implications for systemic inflammation and atherosclerosis. Curr Opin Lipidol. 2009;20(1):39-44.
- Morgan-Bathke ME, Jensen MD. Preliminary evidence for reduced adipose tissue inflammation in vegetarians compared with omnivores. Nutr J. 2019;18(1):45.
- Ryu TY, Park J, Scherer PE. Hyperglycemia as a risk factor for cancer progression. Diabetes Metab J. 2014;38(5):330-336.
- Klein AV, Kiat H. Detox diets for toxin elimination and weight management: a critical review of the evidence. J Hum Nutr Diet. 2015;28(6):675-686.
- Dirtu AC, Dirinck E, Malarvannan G, et al. Dynamics of organohalogenated contaminants in human serum from obese individuals during one year of weight loss treatment. Environ Sci Technol. 2013;47(21):12441-12449.
- Ravussin E, Redman LM, Rochon J, et al. A 2-year randomized controlled trial of human caloric restriction: feasibility and effects on predictors of health span and longevity. J Gerontol A Biol Sci Med Sci. 2015;70(9):1097-1104.
- Mercken EM, Crosby SD, Lamming DW, et al. Calorie restriction in humans inhibits the PI3K/AKT pathway and induces a younger transcription profile. Aging Cell. 2013;12(4):645-651.
- Tannenbaum A, Silverstone H. Nutrition in relation to cancer. Adv Cancer Res. 1953;1:451-501.
- Lankelma J, Kooi B, Krab K, Dorsman JC, Joenje H, Westerhoff HV. A reason for intermittent fasting to suppress the awakening of dormant breast tumors. Biosystems. 2015;127:1-6.
- Walford RL, Harris SB, Gunion MW. The calorically restricted low-fat nutrient-dense diet in Biosphere 2 significantly lowers blood glucose, total leukocyte count, cholesterol, and blood pressure in humans. Proc Natl Acad Sci U S A. 1992;89(23):11533-11537.
- Sera N, Morita K, Nagasoe M, Tokieda H, Kitaura T, Tokiwa H. Binding effect of polychlorinated compounds and environmental carcinogens on rice bran fiber. J Nutr Biochem. 2005;16(1):50-58.
- Jandacek RJ, Heubi JE, Buckley DD, et al. Reduction of the body burden of PCBs and DDE by dietary intervention in a randomized trial. J Nutr Biochem. 2014;25(4):483-488.
- Redgrave TG, Wallace P, Jandacek RJ, Tso P. Treatment with a dietary fat substitute decreased Arochlor 1254 contamination in an obese diabetic male. J Nutr Biochem. 2005;16(6):383-384.
- Geusau A, Tschachler E, Meixner M, et al. Olestra increases faecal excretion of 2,3,7,8-tetrachlorodibenzo-p-dioxin. Lancet. 1999;354(9186):1266-1267.
- Jandacek RJ, Anderson N, Liu M, Zheng S, Yang Q, Tso P. Effects of yo-yo diet, caloric restriction, and olestra on tissue distribution of hexachlorobenzene. Am J Physiol Gastrointest Liver Physiol. 2005;288(2):G292-299.
- Arguin H, Sánchez M, Bray GA, et al. Impact of adopting a vegan diet or an olestra supplementation on plasma organochlorine concentrations: results from two pilot studies. Br J Nutr. 2010;103(10):1433-1441.
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El ayuno para eliminar toxinas
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Para prevenir la intoxicación ve:
- ¿Cuánto tiempo para desintoxicarse del pescado antes del embarazo?
- Nuestra grasa y los contaminantes del salmón
- Dioxinas en el bagre de piscifactoría de los Estados Unidos
El ayuno también tiene su lado malo, ver por ejemplo ¿Es seguro ayunar para perder peso?
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