A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba.
El arsénico es un metal pesado cancerígeno y su principal mecanismo de daño parece estar relacionado al estrés oxidativo. La acumulación de radicales libres que produce puede matar células y dañar nuestro ADN e incluso alterar la capacidad del cuerpo para repararlo una vez que está dañado. Entonces, si el daño es la oxidación, ¿sería una solución comer alimentos ricos en antioxidantes, como la cúrcuma, que posee un pigmento con esa propiedad conocido como curcumina?
Como puede confirmar cualquier persona familiarizada con mis videos, “numerosos estudios clínicos han sugerido que la curcumina tiene eficacia terapéutica contra una variedad de enfermedades humanas”, como el cáncer, la diabetes, el alzhéimer y enfermedades inflamatorias intestinales, articulares, pulmonares, cutáneas y oculares.
En términos de protección contra metales pesados, los estudios sugieren que la cúrcuma podría ayudar a eliminar los radicales libres, además de quelar o unir metales pesados. Pero todo es solo teoría, hasta que se ponga a prueba. Hasta hace poco, la única investigación que había era un estudio del efecto de la curcumina para la oxidación inducida por metales pesados en cerebros de rata hechos puré, por ejemplo. ¿Por qué no se le dio un poco de cúrcuma a la gente? No es que no haya millones de personas que hayan estado expuestas al arsénico y que necesiten ayuda.
De hecho, en el mayor desastre químico de la historia de la humanidad, se instalaron “pozos entubados” en Bangladesh para proporcionar agua limpia. Si bien UNICEF tenía buenas intenciones, no analizaron el agua en busca de arsénico y la gente comenzó a padecer lesiones en los pies. Hasta 1 de cada 10 personas en algunas partes del país morirá de algún cáncer causado por la exposición al arsénico. Este desastre permitió a la comunidad médica documentar todo tipo de cánceres “interesantes”, pero ¿por qué no darles algo que los pueda ayudar, como la curcumina de cúrcuma?
Los investigadores hicieron justo eso. Después de determinar la extensión del daño del ADN en los sujetos del estudio, la mitad fue seleccionada al azar y recibió cápsulas de curcumina mezcladas con un poco de compuesto de pimienta negra, mientras que la otra mitad recibió un placebo. Se analizó la cantidad de daño en el ADN en los 2 grupos, y se encontró en ambos un daño mayor que en el grupo de control, cuyos participantes no habían estado expuestos. Como querían establecer una línea de base en los grupos expuestos, esperaron 3 meses para comenzar el estudio, tiempo durante el cual el daño se mantuvo estable. Luego, durante otros 3 meses, procedieron a darles las cápsulas correspondientes. El placebo no hizo mucha diferencia, pero, durante el primer mes, los investigadores pudieron comprobar que la curcumina funcionaba. Para el tercer mes, el daño del ADN en el grupo de arsénico tratado con curcumina no era peor que en aquellos que no habían estado expuestos. ¡Asombroso! “La comparación de las poblaciones que recibieron curcumina y placebo estableció que la curcumina tenía un papel eficaz en la regresión del daño al ADN por lo que se consideró un excelente agente antioxidante”. También encontraron que la curcumina deshacía el arsénico paralizante de las enzimas reparadoras del ADN, lo que ayudaba a prevenir el daño y además facilitaba su reparación. “Por lo tanto, la intervención con curcumina podría ser una modalidad útil para la prevención de la carcinogénesis inducida por arsénico [desarrollo de cáncer]”.
Es importante asegurarse de que la cúrcuma no esté contaminada con metales pesados. Casi una cuarta parte de las especias compradas en Boston contenían plomo, pero no se trata de comprar marcas estadounidenses o extranjeras, ya que no se encontró una diferencia significativa en los niveles de plomo entre ambas.
¿Qué hay de comer frutas y verduras ricas en antioxidantes? La razón por la que nos preocupamos por el daño del ADN es por el cáncer. ¿Qué pasaría si se midieran los niveles de betacaroteno en personas expuestas al arsénico que desarrollaron cáncer en comparación con las que no? El betacaroteno es como un indicador de la ingesta de frutas y verduras. La forma en que se obtienen niveles altos en sangre es comiendo muchos alimentos saludables, como verduras de hoja verde y batatas. En comparación con aquellos con niveles bajos, los que contaban con niveles altos tenían un 99% menos de probabilidades de contraer cáncer inducido por arsénico. Entonces, si eliges comer arroz, ¿por qué no agregarle algunas batatas?
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