Vapores de la carne: humo de segunda mano de la dieta

Dr. Michael Greger · 1 febrero 13 · Volumen 12

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Los hidrocarburos aromáticos policíclicos en los vapores que se liberan durante la cocción de la carne podrían ser nocivos para el desarrollo del feto y aumentar el riesgo de cáncer.

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Transcripción

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ver el video más arriba. La traducción y edición de este contenido fue contribuida por Viviana Garcia.

La última vez que hablé sobre este estudio fue en el contexto de los carcinógenos en el olor del tocino frito. La capacidad para mutar ADN de los humos generados al freír carne, explica potencialmente tanto el “aumento del riesgo de (cáncer) del tracto respiratorio entre los cocineros” como la ”menor proporción de muertes por enfermedades respiratorias y cáncer de pulmón entre los vegetarianos”.

Esto se confirmó en un nuevo estudio sobre la exposición de embarazadas tanto al consumo de carne asada como a la simple exposición a los vapores en el aire al asar la carne, incluso si no la comían. Sí, el estudio encontró evidencia de que la exposición prenatal a los hidrocarburos aromáticos policíclicos de una ”dieta que incluye carne asada podría ser peligrosa para el desarrollo fetal”. Por ejemplo, el ”efecto de la carne asada consumida en el último trimestre del embarazo produjo un déficit de peso al nacer de 165 gramos”, un peso significativamente menor.

Pero, aunque no la comiera, la sola exposición al aire, representó un déficit de peso al nacer. En comparación con la no exposición, oral o al aire, solo estar cerca de la parrilla se asoció con un déficit de peso al nacer, que incluye una circunferencia más pequeña de la cabeza del recién nacido. Casi la misma contracción de la cabeza se ve si ella realmente comió la carne. Miren, ”después de ser absorbidos en el cuerpo, estos compuestos (de carne cocida) se distribuyen a casi todos los órganos internos y se transfieren al feto a través de la placenta”. Y parece que los recién nacidos y los niños pequeños son especialmente vulnerables a los efectos tóxicos… en términos de la culminación del parto. Lo más importante: se ha documentado recientemente que la exposición prenatal al aire con HAP también puede tener un efecto en el futuro desarrollo cognitivo de los niños. Nunca se debe fumar cerca de los niños, tal vez también deberíamos dejar de asar cerca de ellos.

Incluso el solo vivir al lado de un restaurante, que prepara carne, puede representar un riesgo. Midieron el ”riesgo incremental de cáncer de por vida”: el exceso de casos de cáncer previsto en los vecinos de la parte trasera de los restaurantes, teniendo en cuenta lo que arrojan por los tubos de escape conectados a los extractores de humo de la cocina.

Compararon lo que salía de los restaurantes chinos, los de estilo americano, y los establecimientos de asados. ¿Cuál creen que fue el peor? ¡Fueron los chinos! ¿Por qué no los de asados? Pues bien, piensan que fue por el pescado. En los restaurantes chinos asan más pescado que en los de asados.

¿Qué tan malo es? Se estima que, debido al excesivo riesgo de cáncer, uno no quisiera vivir justo detrás de un restaurante chino más de uno o dos días al mes, aunque tal vez se podría agregar un día extra detrás de uno de los otros restaurantes.

Su modelo sugiere que puede ser más riesgoso para los adultos, ya que respiran más, comen más, y tienen más piel para absorber las sustancias cancerígenas, en comparación con los niños. Sin embargo, en lugar de intentar respirar menos, sería mejor mudarse o convencer al restaurante de… volverse vegetariano.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Fuentes

Reconocimientos

Imágenes gracias a Valters Krontals y Kake Pugh vía flickr

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ver el video más arriba. La traducción y edición de este contenido fue contribuida por Viviana Garcia.

La última vez que hablé sobre este estudio fue en el contexto de los carcinógenos en el olor del tocino frito. La capacidad para mutar ADN de los humos generados al freír carne, explica potencialmente tanto el “aumento del riesgo de (cáncer) del tracto respiratorio entre los cocineros” como la ”menor proporción de muertes por enfermedades respiratorias y cáncer de pulmón entre los vegetarianos”.

Esto se confirmó en un nuevo estudio sobre la exposición de embarazadas tanto al consumo de carne asada como a la simple exposición a los vapores en el aire al asar la carne, incluso si no la comían. Sí, el estudio encontró evidencia de que la exposición prenatal a los hidrocarburos aromáticos policíclicos de una ”dieta que incluye carne asada podría ser peligrosa para el desarrollo fetal”. Por ejemplo, el ”efecto de la carne asada consumida en el último trimestre del embarazo produjo un déficit de peso al nacer de 165 gramos”, un peso significativamente menor.

Pero, aunque no la comiera, la sola exposición al aire, representó un déficit de peso al nacer. En comparación con la no exposición, oral o al aire, solo estar cerca de la parrilla se asoció con un déficit de peso al nacer, que incluye una circunferencia más pequeña de la cabeza del recién nacido. Casi la misma contracción de la cabeza se ve si ella realmente comió la carne. Miren, ”después de ser absorbidos en el cuerpo, estos compuestos (de carne cocida) se distribuyen a casi todos los órganos internos y se transfieren al feto a través de la placenta”. Y parece que los recién nacidos y los niños pequeños son especialmente vulnerables a los efectos tóxicos… en términos de la culminación del parto. Lo más importante: se ha documentado recientemente que la exposición prenatal al aire con HAP también puede tener un efecto en el futuro desarrollo cognitivo de los niños. Nunca se debe fumar cerca de los niños, tal vez también deberíamos dejar de asar cerca de ellos.

Incluso el solo vivir al lado de un restaurante, que prepara carne, puede representar un riesgo. Midieron el ”riesgo incremental de cáncer de por vida”: el exceso de casos de cáncer previsto en los vecinos de la parte trasera de los restaurantes, teniendo en cuenta lo que arrojan por los tubos de escape conectados a los extractores de humo de la cocina.

Compararon lo que salía de los restaurantes chinos, los de estilo americano, y los establecimientos de asados. ¿Cuál creen que fue el peor? ¡Fueron los chinos! ¿Por qué no los de asados? Pues bien, piensan que fue por el pescado. En los restaurantes chinos asan más pescado que en los de asados.

¿Qué tan malo es? Se estima que, debido al excesivo riesgo de cáncer, uno no quisiera vivir justo detrás de un restaurante chino más de uno o dos días al mes, aunque tal vez se podría agregar un día extra detrás de uno de los otros restaurantes.

Su modelo sugiere que puede ser más riesgoso para los adultos, ya que respiran más, comen más, y tienen más piel para absorber las sustancias cancerígenas, en comparación con los niños. Sin embargo, en lugar de intentar respirar menos, sería mejor mudarse o convencer al restaurante de… volverse vegetariano.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Imágenes gracias a Valters Krontals y Kake Pugh vía flickr

Nota del Doctor

El video anterior al que me referí es Carcinógenos en el olor del tocino frito.

¿De qué otra manera podemos proteger a la próxima generación? Véase:

¿Ya ensayaste la función de búsqueda? Si escribes “embarazo” en el campo de búsqueda en la esquina superior derecha, verás que hay una selección de mis muchos otros videos sobre el embarazo.

¿De qué otra manera podemos proteger nuestros pulmones? Ve: Prevención de la EPOC con la dieta y Tratamiento de la EPOC con la dieta.

Para una mejor perspectiva, vean mi entrada de blog sobre el tema: Reducción de la cabeza por el asado de carnes.

Échale un vistazo a la página de información sobre los recursos traducidos.

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