
La mejor dieta para envejecer de manera sana
Cambiar un 1 % del consumo de proteína animal por proteína vegetal se asoció a un cúmulo de déficit relacionado con la edad significativamente menor.
El análisis más completo y sistemático de las causas de muerte involucró a casi quinientos investigadores de más de trescientas instituciones en cincuenta países y examinó casi cien mil fuentes de datos. El histórico estudio Global Burden of Disease encontró que la carne procesada, incluido el tocino, es responsable de la muerte de más de ochocientas mil personas cada año. A nivel mundial, eso es cuatro veces más personas que las que mueren por el uso de drogas ilícitas.
Además del alto contenido de grasas saturadas y el contenido típico de sodio de las carnes procesadas, ¿qué más pueden contener estos productos que son dañinos para nuestra salud?
Aunque el consumo de carne fresca también se ha asociado con el cáncer y algunas otras enfermedades crónicas, las carnes procesadas o curadas pueden ser particularmente dañinas. El estudio NIH-AARP de más de quinientos mil estadounidenses sugirió que el 20 por ciento de las muertes por enfermedades cardíacas entre las mujeres estadounidenses podrían evitarse si los mayores consumidores de carne procesada redujeran el equivalente a menos de media tira de tocino al día. No es de extrañar que el Instituto Estadounidense para la Investigación del Cáncer recomiende que simplemente se “evite la carne procesada como el jamón, el tocino, el salami, los hot dogs y las salchichas”.
¿Qué pasa con ese tentador aroma de tocino chisporroteante? Los vapores producidos al freír tocino contienen una clase de carcinógenos llamados nitrosaminas. Aunque toda la carne puede liberar vapores potencialmente cancerígenos, la carne procesada como el tocino puede ser la peor: un estudio de 1995 descubrió que sus vapores causan unas cuatro veces más mutaciones en el ADN que los vapores de las hamburguesas de carne fritas a temperaturas similares.
Además, un par de estudios gemelos de las universidades de Columbia y Harvard encontraron que el consumo de carne curada, como tocino, mortadela, jamón, hot dogs, salchichas y salami, puede aumentar el riesgo de EPOC. Se cree que se debe a los conservantes de nitrito en la carne, que pueden imitar las propiedades dañinas para los pulmones de los subproductos de nitrito del humo del cigarrillo.
La información de esta página ha sido recopilada de las investigaciones del Dr. Greger. Las fuentes de los videos citados se pueden consultar en la página del video en la sección llamada “Fuentes citadas”. Las referencias también se pueden encontrar al final de sus libros.
Imagen de: Pixabay. La imagen ha sido modificada.
Créditos de imagen: Pixabay. La imagen ha sido modificada.
Cambiar un 1 % del consumo de proteína animal por proteína vegetal se asoció a un cúmulo de déficit relacionado con la edad significativamente menor.
Si te importa tanto tu salud que te resultaría una locura fumarte un cigarrillo antes y después de comer, quizá deberías comer tacos de frijoles en vez de tacos de carne.
Cuantifico los riesgos de cáncer de colon y recto por comer tocino, jamón, perros calientes, salchichas y embutidos.
¿Cómo respondieron la industria cárnica, los gobiernos y las organizaciones contra el cáncer a la confirmación de que la carne procesada (como el tocino, el jamón, los hot dogs y los fiambres) causa cáncer?
¿Qué pasa si comparamos al baru con el resto de frutos secos?
Si los nitritos de alimentos como el jamón y el tocino causan daño pulmonar, ¿qué hay de las carnes “no curadas” y “sin nitritos añadidos”?
Los modelos de laboratorio sugieren que las dosis extremas de hierro hemo pueden ser perjudiciales, pero ¿qué pasa con los efectos de las dosis nutricionales en los seres humanos? Una mirada a los efectos cancerígenos del hemo.
¿Es el hemo un simple sujeto inocente en el vínculo entre la ingesta de carne y el cáncer de mama, la diabetes, la enfermedad cardiaca, la apoplejía y la presión arterial alta?
Tenemos una habilidad increíble para distinguir la densidad calórica de los alimentos, pero solo en un rango natural
Nuevos descubrimientos en la cronobiología (el estudio de los ritmos circadianos) podrían ayudar a resolver el misterio de la desaparición de las calorías matutinas en los estudios sobre el desayuno.