El significado del nuevo rango de presión sanguínea recomendado

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Los métodos naturales pueden funcionar mejor para bajar la hipertensión que el uso de medicamentos, porque estás tratando la verdadera causa del problema; además, solo tienen efectos secundarios positivos.

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A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Cecilia Sassot y Macarena Troscé voluntarios activos en NutritionFacts.org.

El principal asesino en Estados Unidos y en toda la Tierra es una mala dieta. Por eso dedico mi vida a estudiar la alimentación. El segundo asesino es la presión arterial alta. Es tan mortal porque aumenta el riesgo de morir de muchas enfermedades distintas: desde enfermedad cardíaca y apoplejía hasta fallos cardíacos y renales.

Estamos hablando de un aumento exponencial del riesgo de morir de un derrame cuando la presión es mayor a 110 sobre 70, y un aumento exponencial del riesgo de morir de enfermedad cardíaca también con una presión que supera 110/70. Solíamos considerar normal una presión arterial alta de 175. “Normal” si quieres morir de causas “normales”, como un paro cardíaco o un derrame cerebral. Una presión “normal” de 175 sobre 110 podría ponerte por encima de un 1000% de riesgo más alto de morir de un derrame comparado con el valor ideal, no el normal, sino el ideal, que baja a unos 110/70.

La definición de presión arterial alta, o “hipertensión”, bajó de 190/110 a 160/95 con umbrales de tratamiento para grupos de alto riesgo a partir de 150/90 hasta 140/90 y, más recientemente, 130/80. Ahora bien, con esta nueva definición, en vez de que haya 1 cada 3 estadounidenses con hipertensión, está más cerca de 1 cada 2, o unos dos tercios entre personas de más de 45 años. Cada vez que desciende el umbral, decenas de millones de personas más se etiquetan como “enfermas”, se da ese efecto negativo.

Lo mismo pasa con los lineamientos del colesterol, que se ponen más y más estrictos. Pero no culpen a los lineamientos. Los estadounidenses están enfermos. Ese es el verdadero problema. El estilo de vida estadounidense es el problema, no los lineamientos. 

Tal vez deberíamos enfocarnos en eso.

Después de todo, el principal asesino de hombres y mujeres es la enfermedad cardíaca, una enfermedad que puede prevenirse, detenerse y revertirse con una dieta suficientemente sana.

Entonces, aun si un colesterol de 200 puede ser normal, deberíamos decirle a la gente que apunte a menos de 150. Aunque un BMI de 24,9 técnicamente no implica sobrepeso, una mujer de altura promedio, por ejemplo, estaría mejor con menos de 54 kilos en vez de 65. De forma similar, aunque una presión arterial de 120/80 pueda ser normal, 110 sería un mejor tope máximo y 70 un mejor tope mínimo, ya que aun en ese rango de entre 70 a 75 o 75 a 80, cada incremento de 5 puntos se asocia con un tercio más de derrames y al menos un quinto más de enfermedad cardíaca.

Entonces, ¿por qué los nuevos lineamientos llegan hasta 130/80? Con un promedio de tres drogas distintas para la presión arterial puedes forzar que la presión arterial de la gente baje de 140 a 120 comparado con solo dos drogas para la presión arterial, y la gente con riesgo alto vive más por ello.

Hubo muchas menos muertes en el grupo de tratamiento intensivo, pero, por las dosis más altas y la mayor cantidad de drogas, tuvieron más efectos secundarios. Entonces hay que sopesar los riesgos y los beneficios…

Entre 1% y 2% de gente tomando drogas por 5 años se beneficiarán, sin tener problemas cardiovasculares que, de otra forma, tal vez tendrían. Eso se debe sopesar con el riesgo mayor de tener efectos secundarios adversos. Entonces escucharás comentarios como: Sí, las drogas disminuyen el riesgo de presentar ‘eventos’ en un 25%, pero aumentan el riesgo de tener efectos secundarios serios en un 88%. Bien, pero esos eventos pueden incluir cosas como la muerte, mientras que los efectos secundarios son cosas como desmayarse.

Estos eventos negativos tienen que compararse con los beneficios con respecto a los eventos cardiovasculares y las muertes asociados con un control intensivo de la presión arterial sistólica. Es decir, si usamos drogas para reducir la presión de la gente de alto riesgo a un máximo de 120 podríamos prevenir más de 100.000 muertes y 46.000 casos de fallos cardíacos por año, pero podríamos causar 43.000 casos de alteraciones de los electrolitos y 88.000 casos de daño renal grave. No es lo ideal, pero es mejor que morirse.

Entonces, puedes ver el problema que tienen los comités de lineamientos. Por un lado, bajar la presión arterial es bueno para el corazón, los riñones y el cerebro, pero, en cierto punto, los efectos secundarios de las drogas podrían superar los beneficios. Idealmente, queremos disminuir la presión arterial de los pacientes lo más posible, pero solo queremos usar drogas  para conseguirlo cuando “los efectos del tratamiento sean menos destructivos que la presión arterial alta”.

El problema es que la mayoría de la gente que muere de ataques cardíacos, fallos cardíacos y derrames puede estar en ese rango límite que no es suficientemente alto para garantizar un tratamiento con drogas.

Si tan solo hubiera una manera de bajar la presión arterial sin usar drogas para obtener lo mejor de ambos mundos… Por suerte, la hay. Hacer ejercicio aeróbico regular, bajar de peso, dejar de fumar, aumentar la ingesta diaria de fibra, disminuir la ingesta de alcohol, llevar una dieta más basada en plantas y reducir el consumo de sal. La ventaja es, primero, que no haya efectos secundarios negativos. Algunos cambios en el estilo de vida pueden ser realmente mejores que las drogas, porque se trata la causa, y realmente tienen efectos secundarios positivos. Entonces, no se beneficia solo un 1% o 2 % en 5 años… se benefician todos. 

Pronto exploraremos un abordaje sin drogas: el ayuno solo con agua.

Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.

Créditos de la imagen: Gerald Oswald vía pixabay. La imagen ha sido modificada.

Video producción de Glass Entertainment

Gráficos de Avocado Video

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Cecilia Sassot y Macarena Troscé voluntarios activos en NutritionFacts.org.

El principal asesino en Estados Unidos y en toda la Tierra es una mala dieta. Por eso dedico mi vida a estudiar la alimentación. El segundo asesino es la presión arterial alta. Es tan mortal porque aumenta el riesgo de morir de muchas enfermedades distintas: desde enfermedad cardíaca y apoplejía hasta fallos cardíacos y renales.

Estamos hablando de un aumento exponencial del riesgo de morir de un derrame cuando la presión es mayor a 110 sobre 70, y un aumento exponencial del riesgo de morir de enfermedad cardíaca también con una presión que supera 110/70. Solíamos considerar normal una presión arterial alta de 175. “Normal” si quieres morir de causas “normales”, como un paro cardíaco o un derrame cerebral. Una presión “normal” de 175 sobre 110 podría ponerte por encima de un 1000% de riesgo más alto de morir de un derrame comparado con el valor ideal, no el normal, sino el ideal, que baja a unos 110/70.

La definición de presión arterial alta, o “hipertensión”, bajó de 190/110 a 160/95 con umbrales de tratamiento para grupos de alto riesgo a partir de 150/90 hasta 140/90 y, más recientemente, 130/80. Ahora bien, con esta nueva definición, en vez de que haya 1 cada 3 estadounidenses con hipertensión, está más cerca de 1 cada 2, o unos dos tercios entre personas de más de 45 años. Cada vez que desciende el umbral, decenas de millones de personas más se etiquetan como “enfermas”, se da ese efecto negativo.

Lo mismo pasa con los lineamientos del colesterol, que se ponen más y más estrictos. Pero no culpen a los lineamientos. Los estadounidenses están enfermos. Ese es el verdadero problema. El estilo de vida estadounidense es el problema, no los lineamientos. 

Tal vez deberíamos enfocarnos en eso.

Después de todo, el principal asesino de hombres y mujeres es la enfermedad cardíaca, una enfermedad que puede prevenirse, detenerse y revertirse con una dieta suficientemente sana.

Entonces, aun si un colesterol de 200 puede ser normal, deberíamos decirle a la gente que apunte a menos de 150. Aunque un BMI de 24,9 técnicamente no implica sobrepeso, una mujer de altura promedio, por ejemplo, estaría mejor con menos de 54 kilos en vez de 65. De forma similar, aunque una presión arterial de 120/80 pueda ser normal, 110 sería un mejor tope máximo y 70 un mejor tope mínimo, ya que aun en ese rango de entre 70 a 75 o 75 a 80, cada incremento de 5 puntos se asocia con un tercio más de derrames y al menos un quinto más de enfermedad cardíaca.

Entonces, ¿por qué los nuevos lineamientos llegan hasta 130/80? Con un promedio de tres drogas distintas para la presión arterial puedes forzar que la presión arterial de la gente baje de 140 a 120 comparado con solo dos drogas para la presión arterial, y la gente con riesgo alto vive más por ello.

Hubo muchas menos muertes en el grupo de tratamiento intensivo, pero, por las dosis más altas y la mayor cantidad de drogas, tuvieron más efectos secundarios. Entonces hay que sopesar los riesgos y los beneficios…

Entre 1% y 2% de gente tomando drogas por 5 años se beneficiarán, sin tener problemas cardiovasculares que, de otra forma, tal vez tendrían. Eso se debe sopesar con el riesgo mayor de tener efectos secundarios adversos. Entonces escucharás comentarios como: Sí, las drogas disminuyen el riesgo de presentar ‘eventos’ en un 25%, pero aumentan el riesgo de tener efectos secundarios serios en un 88%. Bien, pero esos eventos pueden incluir cosas como la muerte, mientras que los efectos secundarios son cosas como desmayarse.

Estos eventos negativos tienen que compararse con los beneficios con respecto a los eventos cardiovasculares y las muertes asociados con un control intensivo de la presión arterial sistólica. Es decir, si usamos drogas para reducir la presión de la gente de alto riesgo a un máximo de 120 podríamos prevenir más de 100.000 muertes y 46.000 casos de fallos cardíacos por año, pero podríamos causar 43.000 casos de alteraciones de los electrolitos y 88.000 casos de daño renal grave. No es lo ideal, pero es mejor que morirse.

Entonces, puedes ver el problema que tienen los comités de lineamientos. Por un lado, bajar la presión arterial es bueno para el corazón, los riñones y el cerebro, pero, en cierto punto, los efectos secundarios de las drogas podrían superar los beneficios. Idealmente, queremos disminuir la presión arterial de los pacientes lo más posible, pero solo queremos usar drogas  para conseguirlo cuando “los efectos del tratamiento sean menos destructivos que la presión arterial alta”.

El problema es que la mayoría de la gente que muere de ataques cardíacos, fallos cardíacos y derrames puede estar en ese rango límite que no es suficientemente alto para garantizar un tratamiento con drogas.

Si tan solo hubiera una manera de bajar la presión arterial sin usar drogas para obtener lo mejor de ambos mundos… Por suerte, la hay. Hacer ejercicio aeróbico regular, bajar de peso, dejar de fumar, aumentar la ingesta diaria de fibra, disminuir la ingesta de alcohol, llevar una dieta más basada en plantas y reducir el consumo de sal. La ventaja es, primero, que no haya efectos secundarios negativos. Algunos cambios en el estilo de vida pueden ser realmente mejores que las drogas, porque se trata la causa, y realmente tienen efectos secundarios positivos. Entonces, no se beneficia solo un 1% o 2 % en 5 años… se benefician todos. 

Pronto exploraremos un abordaje sin drogas: el ayuno solo con agua.

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Créditos de la imagen: Gerald Oswald vía pixabay. La imagen ha sido modificada.

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Nota del Doctor

Pronto publicaremos Cómo bajar la tensión mediante cambios en el estilo de vida, donde comparamos el efecto del ayuno con el de las medicaciones, disminuyendo el consumo de alcohol, carne y sal, y aumentando el consumo de frutas y verduras o siguiendo una dieta totalmente basada en plantas. Finalmente, una revisión de todos los estudios de ayuno hasta el presente en Ayunar para revertir la presión arterial alta de forma natural.

¿Es tan mala la sal? Puedes ver Los escépticos sobre el sodio esparcen duda y La evidencia de que la sal incrementa la presión arterial.

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