El análisis más completo y sistemático de las causas de muerte, jamás llevado a cabo, nos permite responder a preguntas como: ¿cuántas vidas se podrían salvar si la gente redujera su consumo de refrescos? ¿La respuesta? Nuestro mejor cálculo es: 299521. Los refrescos no solo son malos porque son calorías vacías y, por lo tanto, no son un alimento promotor de la salud; parece ser un alimento que promueve activamente la muerte. Por supuesto no es tan mortal como el tocino, la mortadela, el jamón o los perros calientes: 800000 muertes anuales; matando el doble de mujeres que la violencia doméstica, 5 veces más personas que todas las drogas ilegales juntas.
Por otra parte, comer más cereales integrales podría salvar 1.7 millones de vidas cada año. Más verduras, 1.8 millones de vidas. Si tan sólo comiéramos más frutos secos y semillas, se salvarían 2.5 millones de vidas. Pero la fruta es aparentemente lo que más necesita el mundo; no analizaron las legumbres: 4.9 millones de vidas penden de un hilo cada año y, la cura no son los medicamentos o las vacunas, la cura es la fruta.
Una de las razones por las que las dietas a base de vegetales pueden salvar a tantos millones es porque el factor de riesgo de muerte #1 en el mundo es la presión arterial alta, que conlleva a la pérdida de 9 millones de personas año tras año.
En los Estados Unidos, la presión arterial alta afecta a casi 78 millones, es decir, a 1 de cada 3, y a medida que envejecemos nuestra presión sube más y más, tanto que a los 60 años, afecta a más de la mitad. Si esto afecta a la mayoría cuando envejecemos, ¿tal vez no es una enfermedad como tal, sino solo una consecuencia natural e inevitable del envejecimiento? No. Hemos sabido desde hace casi un siglo que la presión arterial alta no tiene por qué ocurrir. Los investigadores midieron la presión arterial de un millar de personas en zonas rurales de Kenia, que comían una dieta centrada en alimentos vegetales no procesados: cereales integrales, legumbres, verduras, frutas y vegetales de hoja verde oscuro. Hasta los 40 años, la presión arterial de los africanos rurales fue aproximadamente igual a la de los europeos y estadounidenses, alrededor de 120 sobre 80; pero a medida que los occidentales envejecen, sus presiones suben de tal manera que a los 60 años la persona promedio puede ser hipertensa, excediendo los 140 sobre 90. Pero ¿qué pasa con los que no están siguiendo la dieta occidental? Su presión mejoró con la edad. No sólo no desarrollan hipertensión, su presión arterial en realidad mejoró.
Este umbral de 140 sobre 90 es arbitrario. Al igual que los estudios demuestran que cuanto más bajo sea el colesterol, es mejor; en realidad no hay niveles seguros de colesterol por encima de 150. Los estudios sobre la presión arterial también apoyan el enfoque de: “cuanto más baja, mejor” respecto a la reducción de la presión arterial. Incluso las personas que empiezan con una presión arterial por debajo de 120 sobre 80 parecen beneficiarse de la reducción de la presión arterial. Pero, ¿es posible alcanzar una presión arterial menor de 110 sobre 70? No sólo es posible, es normal para aquellos que comen dietas lo suficientemente saludables.
En el transcurso de dos años en un hospital rural de Kenia, ingresaron 1800 pacientes. ¿Cuántos casos de presión arterial alta encontraron? Cero. Vaya, así que deben haber tenido baja incidencia de enfermedades cardiacas. No, no tenían incidencia de enfermedades cardíacas. No un bajo riesgo, sino ningún riesgo. No se encontró ni un solo caso de arteriosclerosis, nuestro asesino #1.
Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el vídeo más arriba. Esto es sólo una aproximación del audio contribuida por Katie Schloer. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Laura Duarte y Viviana Garcia.
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