Prevenir que el cáncer use TOR

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La contención de la enzima motor-de-envejecimiento TOR (diana de rapamicina), mediante la reducción en la ingesta de productos de origen animal ricos en leucina, como la leche, podría reducir el riesgo de cáncer.

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Durante la última década, más de 5000 artículos han sido publicados acerca de la TOR, una enzima inhibida por el fármaco rapamicina, utilizado experimentalmente para extender la esperanza de vida, pero ya en uso clínico para evitar el rechazo de trasplantes de riñón. “Los pacientes que recibieron rapamicina debido a un trasplante de riñón presentaban un ‘efecto secundario’ peculiar – una disminución en la incidencia de cáncer.” En un grupo de 15 pacientes que presentaban sarcoma de Kaposi comprobado por biopsia (un cáncer que a menudo afecta a la piel), al cabo de tres meses tras iniciar la terapia con rapamicina, “todas las lesiones del sarcoma de Kaposi cutáneo
habían desaparecido en todos los pacientes”.

Esto tiene sentido, dado que TOR “funciona como un regulador maestro de crecimiento y proliferación celular”. Por ejemplo, la producción de TOR está “elevada en casi el 100% de los cánceres de próstata humanos avanzados”. Tal vez por eso el consumo de lácteos se ha considerado “un principal factor de riesgo dietético”. Se solía pensar que eran únicamente las hormonas en la leche, pero tal vez el inicio y progreso del cáncer de próstata es promovido también por la estimulación que ejerce la leche sobre la TOR. “Nuestro entendimiento de la leche de los mamíferos ha pasado de ser una ‘simple comida’ a un sistema de señalización endocrina específica de cada especie”, que activa TOR, “promueve el crecimiento y la proliferación celular, y suprime los mecanismos de limpieza interna de nuestro cuerpo”. Normalmente, la estimulación TOR “propiciada por la leche” se restringe únicamente a la infancia, momento en el que realmente necesitamos esa señal constante a nuestras células para que crezcan y se dividan.

“Desde una perspectiva evolutiva, puede concluirse que el persistente ‘abuso’ del sistema de señalización que promueve el crecimiento, debido al consumo continuado de leche durante toda nuestra vida, mantiene el sello más importante de la biología del cáncer, la señalización de proliferación sostenida”, ¡crecer, crecer, crecer!

TOR parece también jugar un papel en el cáncer de mama. Se han observado niveles más altos de
TOR en tumores de cáncer de mama, y asociados con una enfermedad más agresiva y una menor tasa de supervivencia entre las pacientes con cáncer de mama.

Esto podría explicar por qué las mujeres hospitalizadas por anorexia podrían terminar con sólo la mitad del riesgo de cáncer de mama. “La restricción calórica severa en los seres
humanos puede conferir protección contra el cáncer de mama invasivo” mediante la supresión de la activación de la TOR. Pero no tenemos que matarnos de hambre para suprimir la TOR, simplemente la reducción en la ingesta de proteína animal puede atenuar la actividad general de la TOR. “Además, las dietas que hacen hincapié en los vegetales, especialmente las verduras crucíferas, no sólo disminuyen la
activación de la TOR, sino que también proporcionan inhibidores de TOR naturales derivados de plantas, como el brócoli, el té verde, la soja, la cúrcuma, y las uvas, junto con otras frutas y verduras como cebollas, fresas, arándanos, mangos, y la piel de los pepinos”.

Tal vez por eso las dietas basadas en vegetales se asocian con menor riesgo de muchos tipos de cánceres, por una “regulación a la baja” de la TOR. Así que, “¿estamos finalmente en el umbral de ser capaces de alterar fundamentalmente el envejecimiento humano” y las enfermedades relacionadas con la edad? “Sólo el tiempo lo dirá. Pero si el ritmo y la dirección de los progresos recientes son una indicación, los próximos 5000 estudios sobre TOR resultarán sin duda alguna, muy interesantes”.

Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ver el vídeo más arriba. Esto es solo una aproximación del audio. La traducción y edición de este contenido fue contribuída por Sonia Ramos y Adrián Bravo López.

Por favor, considera ser voluntario para ayudar en la web.

Imágenes gracias a Krissy Venosdale a través de Flickr and Herndon, L.A., Altun, Z.F. and Hall, D.H. 2009. Glossary A. In WormAtlas.doi:10.3908/wormatlas.6.1

Durante la última década, más de 5000 artículos han sido publicados acerca de la TOR, una enzima inhibida por el fármaco rapamicina, utilizado experimentalmente para extender la esperanza de vida, pero ya en uso clínico para evitar el rechazo de trasplantes de riñón. “Los pacientes que recibieron rapamicina debido a un trasplante de riñón presentaban un ‘efecto secundario’ peculiar – una disminución en la incidencia de cáncer.” En un grupo de 15 pacientes que presentaban sarcoma de Kaposi comprobado por biopsia (un cáncer que a menudo afecta a la piel), al cabo de tres meses tras iniciar la terapia con rapamicina, “todas las lesiones del sarcoma de Kaposi cutáneo
habían desaparecido en todos los pacientes”.

Esto tiene sentido, dado que TOR “funciona como un regulador maestro de crecimiento y proliferación celular”. Por ejemplo, la producción de TOR está “elevada en casi el 100% de los cánceres de próstata humanos avanzados”. Tal vez por eso el consumo de lácteos se ha considerado “un principal factor de riesgo dietético”. Se solía pensar que eran únicamente las hormonas en la leche, pero tal vez el inicio y progreso del cáncer de próstata es promovido también por la estimulación que ejerce la leche sobre la TOR. “Nuestro entendimiento de la leche de los mamíferos ha pasado de ser una ‘simple comida’ a un sistema de señalización endocrina específica de cada especie”, que activa TOR, “promueve el crecimiento y la proliferación celular, y suprime los mecanismos de limpieza interna de nuestro cuerpo”. Normalmente, la estimulación TOR “propiciada por la leche” se restringe únicamente a la infancia, momento en el que realmente necesitamos esa señal constante a nuestras células para que crezcan y se dividan.

“Desde una perspectiva evolutiva, puede concluirse que el persistente ‘abuso’ del sistema de señalización que promueve el crecimiento, debido al consumo continuado de leche durante toda nuestra vida, mantiene el sello más importante de la biología del cáncer, la señalización de proliferación sostenida”, ¡crecer, crecer, crecer!

TOR parece también jugar un papel en el cáncer de mama. Se han observado niveles más altos de
TOR en tumores de cáncer de mama, y asociados con una enfermedad más agresiva y una menor tasa de supervivencia entre las pacientes con cáncer de mama.

Esto podría explicar por qué las mujeres hospitalizadas por anorexia podrían terminar con sólo la mitad del riesgo de cáncer de mama. “La restricción calórica severa en los seres
humanos puede conferir protección contra el cáncer de mama invasivo” mediante la supresión de la activación de la TOR. Pero no tenemos que matarnos de hambre para suprimir la TOR, simplemente la reducción en la ingesta de proteína animal puede atenuar la actividad general de la TOR. “Además, las dietas que hacen hincapié en los vegetales, especialmente las verduras crucíferas, no sólo disminuyen la
activación de la TOR, sino que también proporcionan inhibidores de TOR naturales derivados de plantas, como el brócoli, el té verde, la soja, la cúrcuma, y las uvas, junto con otras frutas y verduras como cebollas, fresas, arándanos, mangos, y la piel de los pepinos”.

Tal vez por eso las dietas basadas en vegetales se asocian con menor riesgo de muchos tipos de cánceres, por una “regulación a la baja” de la TOR. Así que, “¿estamos finalmente en el umbral de ser capaces de alterar fundamentalmente el envejecimiento humano” y las enfermedades relacionadas con la edad? “Sólo el tiempo lo dirá. Pero si el ritmo y la dirección de los progresos recientes son una indicación, los próximos 5000 estudios sobre TOR resultarán sin duda alguna, muy interesantes”.

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Nota del Doctor

¿Qué es TOR? Echa un vistazo a estos dos vídeos – algo fascinante:

Más información sobre el cáncer de próstata y los lácteos en El cáncer de próstata y la leche ecológica VS la leche de almendras.

Esta historia continúa en mi siguiente video: Salvar vidas tratando el acné con la dieta.

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