Los niños de madres que eliminaron huevos, leche y pescados durante la lactancia son significativamente menos propensos a tener eccema (incluso años después).
Las dietas de exclusión para el eccema
A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Gabriela Elizondo y Alberto Martínez voluntarios activos en NutritionFacts.org.
El ensayo controlado aleatorio y doble ciego original que relacionó la dieta y el eccema encontró que el eliminar huevos, pollo, leche y carne de la dieta mejoró significativamente el eccema en 70% de los niños que terminaron el estudio. Los estudios subsecuentes encontraron resultados similares, aunque en este caso, por ejemplo, solo parecía funcionar para un cuarto de los niños. Pero, en conclusión, de los 13 estudios en donde se evitó la leche, los huevos, o ambos, 10 de esos 13 estudios documentaron una mejoría clínica general.
La carga económica del eccema causada solo por el consumo de fórmula regular de leche de vaca puede ser de cientos de millones de dólares al año; aunque el consumo de huevos parece ser incluso peor al considerar su relación para predecir la persistencia y la gravedad de la enfermedad. La sensibilización a la clara de huevo y a la leche de vaca puede ocurrir incluso en los bebés amamantados. En base a esto, la fuente de exposición más probable es el paso de proteínas de huevo y vaca a través de la leche materna, sin embargo no se sabe con certeza hasta que se pone a prueba.
Las madres primerizas fueron asignadas a grupos al azar, uno de ellos iba a eliminar los huevos, la leche de vaca y el pescado de su dieta durante los tres primeros meses de lactancia después de dar a luz y el otro grupo iba a continuar su dieta regular. Y de hecho, los niños de madres que no consumieron huevos, leche y pescado fueron significativamente menos propensos a tener eccema a los 6 meses de edad. Aunque después de esa edad la disminución de las tasas de eccema en el grupo que no consumió huevos, leche o pescado ya no fue estadísticamente significativo.
Sin embargo, al seguir a los mismos niños por cuatro años se notó que aquellos de madres que eliminaron huevos, leche y productos lácteos por sólo tres meses durante la lactancia, mostraron menores tasas de eccema incluso años después. Consumir esa dieta hipoalergénica durante la lactancia redujo las tasas de eccema infantil a la mitad.
Comer más alimentos vegetales también puede ayudar. La mayoría de los estudios sobre frutas y vegetales sugieren que un mayor consumo de estos por las madres durante el embarazo, y por los niños en los primeros años, resulta en una reducción del asma, otra enfermedad de tipo alérgico. Tal vez son los fitonutrientes fenólicos en las plantas los que están ayudando, apoyado por la evidencia de que ciertas dietas vegetarianas parecen atenuar la gravedad de enfermedades de la piel en adultos con eccema. Aunque si ves esa referencia a fondo te darás cuenta de que usaron una dieta muy extraña.
Ellos encontraron beneficios sorprendentes para la reducción de la gravedad del eccema, e incluso dos meses después de dejar la dieta, todavía estaban mejor que antes de comenzar con ella. Aunque la dieta incluía solo jugo de verduras, arroz integral, algas marinas, tofu, tahini y té de hoja de caqui, y era bastante restringida calóricamente. Y, solo hacer un ayuno puede mejorar el eccema, como también lo puede mejorar una dieta estrictamente vegetal, que no es tan sorprendente considerando los datos de niños que muestran una gran mejoría al eliminar huevos y productos lácteos.
A pesar de estos datos, los dermatólogos y los pediatras han negado por muchos años el papel de la alimentación en el eccema. A pesar de que hasta un 80% de los niños puede beneficiarse al eliminar la leche y/o los huevos de su dieta, independientemente de lo que muestren las pruebas de alergia. No puedes saber con certeza si la dieta va a ayudar, hasta que lo pongas a prueba en tu propio cuerpo. Y eso es lo que están haciendo los padres. Ellos no están esperando a que sus pediatras se pongan al día; el 75% de los padres de niños afectados por eccema han intentado alguna forma de exclusión dietética, la más común incluye eliminar lácteos y huevos, aunque solo alrededor del 40% de los padres que lo intentaron sintieron que funcionó. Pero bueno, ¿por qué no intentarlo?
Una recomendación típica que usted ve en la literatura médica es: “Mira, si tienes un niño con eccema grave y los medicamentos no funcionan, entonces ¿por qué no tratas de eliminar algunos alimentos de su dieta?”. Pero a mí me parece que esa recomendación está al revés. Si los alimentos están contribuyendo (a causar el eccema), ¿por qué no tratar la causa y eliminar los alimentos ofensivos, y después, si esto no es suficiente, usar los medicamentos?
Ahora, por ahí hay algunas dietas para el eccema bastante locas, como la dieta llamada “pocos alimentos” que excluye todo excepto cordero, papas, arroz crujiente (cereal de arroz inflado), brócoli y peras. Para mi sorpresa, esta dieta en realidad se puso a prueba: ¡Les dije que los doctores estaban desesperados! Pero esta dieta no demostró un beneficio. Básicamente, si no sabes por dónde empezar, el enfoque más sencillo puede ser simplemente eliminar los productos lácteos y los huevos y ver qué pasa. Sin embargo esta es una recomendación polémica. ¿Eliminar el pescado, la carne, los huevos y los productos lácteos de nuestra dieta sin supervisión médica? Eso podría desencadenar una patología relacionada con la desnutrición. ¡¿Qué?! Revisé esa referencia a fondo y es solo otro artículo haciendo una afirmación sin respaldo alguno.
Ahora, si excluyes todo y como el 99% de tu dieta es leche de arroz, pues bueno… obviamente eso es completamente insuficiente, pero lo primero que la mayoría de los padres suelen agregar a la dieta para el eccema de sus hijos son verduras y lo primero que eliminan de sus dietas es la comida chatarra o “basura.” Y no creo que tengamos que preocuparnos por una deficiencia de comida chatarra.
Considera ser voluntario/a para ayudar en la página web.
Iconos creados por Iconic, Herman Susanto y Harden Dwi Lester del The Noun Project
Crédito de la imagen: psyberartist. La imagen ha sido modificada.
Gráficos de Avocado Video
A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Gabriela Elizondo y Alberto Martínez voluntarios activos en NutritionFacts.org.
El ensayo controlado aleatorio y doble ciego original que relacionó la dieta y el eccema encontró que el eliminar huevos, pollo, leche y carne de la dieta mejoró significativamente el eccema en 70% de los niños que terminaron el estudio. Los estudios subsecuentes encontraron resultados similares, aunque en este caso, por ejemplo, solo parecía funcionar para un cuarto de los niños. Pero, en conclusión, de los 13 estudios en donde se evitó la leche, los huevos, o ambos, 10 de esos 13 estudios documentaron una mejoría clínica general.
La carga económica del eccema causada solo por el consumo de fórmula regular de leche de vaca puede ser de cientos de millones de dólares al año; aunque el consumo de huevos parece ser incluso peor al considerar su relación para predecir la persistencia y la gravedad de la enfermedad. La sensibilización a la clara de huevo y a la leche de vaca puede ocurrir incluso en los bebés amamantados. En base a esto, la fuente de exposición más probable es el paso de proteínas de huevo y vaca a través de la leche materna, sin embargo no se sabe con certeza hasta que se pone a prueba.
Las madres primerizas fueron asignadas a grupos al azar, uno de ellos iba a eliminar los huevos, la leche de vaca y el pescado de su dieta durante los tres primeros meses de lactancia después de dar a luz y el otro grupo iba a continuar su dieta regular. Y de hecho, los niños de madres que no consumieron huevos, leche y pescado fueron significativamente menos propensos a tener eccema a los 6 meses de edad. Aunque después de esa edad la disminución de las tasas de eccema en el grupo que no consumió huevos, leche o pescado ya no fue estadísticamente significativo.
Sin embargo, al seguir a los mismos niños por cuatro años se notó que aquellos de madres que eliminaron huevos, leche y productos lácteos por sólo tres meses durante la lactancia, mostraron menores tasas de eccema incluso años después. Consumir esa dieta hipoalergénica durante la lactancia redujo las tasas de eccema infantil a la mitad.
Comer más alimentos vegetales también puede ayudar. La mayoría de los estudios sobre frutas y vegetales sugieren que un mayor consumo de estos por las madres durante el embarazo, y por los niños en los primeros años, resulta en una reducción del asma, otra enfermedad de tipo alérgico. Tal vez son los fitonutrientes fenólicos en las plantas los que están ayudando, apoyado por la evidencia de que ciertas dietas vegetarianas parecen atenuar la gravedad de enfermedades de la piel en adultos con eccema. Aunque si ves esa referencia a fondo te darás cuenta de que usaron una dieta muy extraña.
Ellos encontraron beneficios sorprendentes para la reducción de la gravedad del eccema, e incluso dos meses después de dejar la dieta, todavía estaban mejor que antes de comenzar con ella. Aunque la dieta incluía solo jugo de verduras, arroz integral, algas marinas, tofu, tahini y té de hoja de caqui, y era bastante restringida calóricamente. Y, solo hacer un ayuno puede mejorar el eccema, como también lo puede mejorar una dieta estrictamente vegetal, que no es tan sorprendente considerando los datos de niños que muestran una gran mejoría al eliminar huevos y productos lácteos.
A pesar de estos datos, los dermatólogos y los pediatras han negado por muchos años el papel de la alimentación en el eccema. A pesar de que hasta un 80% de los niños puede beneficiarse al eliminar la leche y/o los huevos de su dieta, independientemente de lo que muestren las pruebas de alergia. No puedes saber con certeza si la dieta va a ayudar, hasta que lo pongas a prueba en tu propio cuerpo. Y eso es lo que están haciendo los padres. Ellos no están esperando a que sus pediatras se pongan al día; el 75% de los padres de niños afectados por eccema han intentado alguna forma de exclusión dietética, la más común incluye eliminar lácteos y huevos, aunque solo alrededor del 40% de los padres que lo intentaron sintieron que funcionó. Pero bueno, ¿por qué no intentarlo?
Una recomendación típica que usted ve en la literatura médica es: “Mira, si tienes un niño con eccema grave y los medicamentos no funcionan, entonces ¿por qué no tratas de eliminar algunos alimentos de su dieta?”. Pero a mí me parece que esa recomendación está al revés. Si los alimentos están contribuyendo (a causar el eccema), ¿por qué no tratar la causa y eliminar los alimentos ofensivos, y después, si esto no es suficiente, usar los medicamentos?
Ahora, por ahí hay algunas dietas para el eccema bastante locas, como la dieta llamada “pocos alimentos” que excluye todo excepto cordero, papas, arroz crujiente (cereal de arroz inflado), brócoli y peras. Para mi sorpresa, esta dieta en realidad se puso a prueba: ¡Les dije que los doctores estaban desesperados! Pero esta dieta no demostró un beneficio. Básicamente, si no sabes por dónde empezar, el enfoque más sencillo puede ser simplemente eliminar los productos lácteos y los huevos y ver qué pasa. Sin embargo esta es una recomendación polémica. ¿Eliminar el pescado, la carne, los huevos y los productos lácteos de nuestra dieta sin supervisión médica? Eso podría desencadenar una patología relacionada con la desnutrición. ¡¿Qué?! Revisé esa referencia a fondo y es solo otro artículo haciendo una afirmación sin respaldo alguno.
Ahora, si excluyes todo y como el 99% de tu dieta es leche de arroz, pues bueno… obviamente eso es completamente insuficiente, pero lo primero que la mayoría de los padres suelen agregar a la dieta para el eccema de sus hijos son verduras y lo primero que eliminan de sus dietas es la comida chatarra o “basura.” Y no creo que tengamos que preocuparnos por una deficiencia de comida chatarra.
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Crédito de la imagen: psyberartist. La imagen ha sido modificada.
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Las dietas de exclusión para el eccema
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URLNota del Doctor
Hablé sobre el ensayo controlado aleatorio y doble ciego original que relacionó la dieta y el eccema en mi último video: Los mejores alimentos para evitar el eccema.
Los tratamientos tópicos sin esteroides están cubiertos en mis videos Tratamiento del eccema con aceite de coco o aceite mineral vs. vaselina y Tratamiento del eccema con aceite de onagra o aceite de borraja vs. aceite de cáñamo.
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