¿Cuáles son las mejores bebidas?

A continuación una aproximación al contenido del audio de este video. Para ver los gráficos, tablas, imágenes o citas a los que Dr. Greger se refiere, ve el video más arriba. La traducción y edición de este contenido ha sido realizada por Tatiana Fernández y Catalina Walsh voluntarios activos en NutritionFacts.org.

Una frase que escucharán repetidamente en mis videos y libros es “el mejor balance de evidencia disponible”. ¿Qué significa eso? Cuando se toman decisiones de vida o muerte como cuál es la mejor manera de alimentarnos a nosotros y a nuestras familias, no importa tanto lo que dice un solo estudio, sino más bien lo que la totalidad de la ciencia analizada por expertos tiene que decir.

Los estudios individuales pueden generar titulares como este (“Estudio no encuentra relación entre ser un fumador pasivo y el cáncer”).

Para saber si realmente existe un vínculo entre ser un fumador pasivo y el cáncer de pulmón, sería mejor ver una revisión o metaanálisis que recopile múltiples estudios a la vez. El problema es que algunas revisiones afirman que “respirar el humo de tabaco de otras personas es una causa de cáncer de pulmón” y otras revisiones afirman lo contrario, diciendo que los efectos del humo en un fumador pasivo son insignificantes y que hablar de esto podría fomentar miedos “irracionales” y, ya que estamos en esto, que podrías incluso fumar de 4 a 5 cigarrillos por día sin preocuparte realmente; así que, enciende ese cigarrillo.

¿Por qué los artículos de revisión sobre los efectos en la salud llegan a conclusiones tan diferentes? Bueno, como se puede imaginar, alrededor del 90% de las revisiones escritas por investigadores afiliados a la industria tabacalera dijeron que no era perjudicial, mientras que se obtuvo el número opuesto con revisiones independientes. Las revisiones escritas por investigadores del tabaco tenían 88 veces más probabilidades de concluir que el humo de segunda mano era inofensivo. Todo era parte de una deliberada estrategia corporativa para desacreditar a la ciencia para, en sus propias palabras, desarrollar y divulgar ampliamente la evidencia de que el humo de segunda mano es inofensivo.

Bien, ¿no podríamos solo ceñirnos a las revisiones independientes? El problema es que los investigadores financiados por la industria tienen todo tipo de formas furtivas para no declarar conflictos de interés, lo que dificulta seguirle la pista al dinero. Pero, incluso sin saber quién financió qué, la mayoría de las revisiones aún concluían que el humo de segunda mano era perjudicial. Por lo tanto, al igual que un solo estudio podría no ser tan útil como una compilación de estudios sobre un tema, una sola revisión podría no ser tan útil como una compilación de revisiones. Así, ver una revisión de revisiones como esta, nos puede dar una mejor idea de dónde podría estar el mejor balance de evidencia disponible. En este caso, probablemente sea mejor no inhalar.

¿No sería genial si hubiera revisiones de revisiones para diferentes alimentos? ¡Voilà! Una exhaustiva revisión de metaanálisis y revisiones sistemáticas sobre asociaciones entre grupos de alimentos y bebidas, y las principales enfermedades crónicas relacionadas con la dieta. Empecemos con las bebidas. Los hallazgos se clasificaron en tres categorías: protectoras, neutras o perjudiciales. En primer lugar: té versus café. En ambos casos, la mayoría de las revisiones, para cualquier condición que estuvieran estudiando, descubrieron que ambas bebidas eran protectoras. Pero pueden ver como esto apoya mi recomendación del té por encima del café. Cada taza de café es una oportunidad que se pierde de beber algo aún más saludable, una taza de té verde.

No es de sorprender que la soda o refresco se hunda hasta el fondo, pero aún así, ¿el 14% de los estudios mencionaron efectos protectores de beber soda? Bueno, la mayoría eran referencias a trabajos como este: un estudio transversal que encontró que niñas de 8º grado que bebían más soda eran más delgadas que las niñas que bebían menos. Bien, pero esto fue solo en un momento dado. ¿Qué crees que sea más probable, que las chicas más gordas pesaban más porque bebían menos refrescos o que bebían menos refrescos azucarados porque eran más pesadas? La abstención de refrescos puede ser una consecuencia de la obesidad en lugar de una causa, pero se señala como protectora, se hace una asociación protectora.

Las fallas en el diseño del estudio también podrían explicar estos números relacionados al vino. Esta revisión de estudios se publicó en 2014, antes de la revolución en nuestra comprensión de los desvanecientes beneficios del alcohol para la salud, sugiriendo que los supuestos beneficios de un consumo de alcohol “moderado” podrían haberse derrumbado finalmente gracias, en parte, a un error sistemático de clasificar erróneamente a los ex bebedores como si hubieran sido abstemios de por vida, como así lo dí a conocer en una profundización en mi última serie de vídeos sobre este tema. Sin embargo, a veces hay asociaciones inexplicables. Por ejemplo, uno de los estudios de bebidas gaseosas encontró que el aumento del consumo de refrescos estaba asociado con un menor riesgo de ciertos tipos de cánceres de esófago.

No me digas, ¿la revisión fue financiada por Coca-Cola? ¡Si, la revisión fue financiada por Coca-Cola! ¿Esto ayuda a explicar estos estudios favorables acerca de la leche? ¿Habrán sido financiados por el Consejo de Lácteos? Se han encontrado aún más conflictos de interés entre estudios sobre la leche que sobre refrescos, en donde los estudios financiados por la industria de todas estas bebidas se mostraron aproximadamente “de cuatro a ocho veces más probables en favorecer los intereses financieros del patrocinador del estudio”.

Dejando de lado la influencia financiera, podría haber razones legítimas asociadas a los efectos protectores del consumo de la leche. Después de todo, aquellos que beben más leche podrían beber menos refrescos, lo que es aún peor; por lo tanto, salen ganando. Pero puede ser algo más que beneficios relativos. El vínculo entre la gaseosa y el cáncer parece un poco frágil, no solo por la conexión con Coca-Cola sino porque es difícil imaginar un mecanismo biológicamente plausible; mientras que incluso algo tan universalmente condenado como el tabaco no es universalmente malo. Como he explorado antes, más de 50 estudios han encontrado una asociación consistentemente protectora con el Parkinson, gracias a la nicotina. Incluso el humo de segunda mano podría ser protector. Pero por supuesto, aún así querrás evitarlo. Puede disminuir el riesgo de Parkinson pero aumenta el riesgo de una enfermedad cerebral que es aún más mortal: un derrame cerebral, aparte del cáncer de pulmón y las enfermedades cardíacas que han matado a millones de estadounidenses desde que se publicó el primer informe del Cirujano General.

Afortunadamente, al ingerir ciertas verduras podríamos obtener algunos de los beneficios sin los riesgos y lo mismo podría ocurrir con los productos lácteos. Como he descrito antes, el consumo de leche se asocia con un mayor riesgo de cáncer de próstata, llevando a recomendar que los varones reduzcan o minimicen su ingesta, pero el consumo de leche se asocia con un menor riesgo de cáncer colorrectal. Esto parece ser un efecto del calcio. Afortunadamente, podríamos obtener lo mejor de ambos mundos consumiendo alimentos vegetales con alto contenido de calcio, como las verduras de hojas verdes y los frijoles.

¿Cuál es la conclusión de nuestra revisión de las revisiones realizadas sobre estos alimentos de origen vegetal al compararlos con los alimentos de origen animal? Lo averiguaremos a continuación.

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